Economía/Agricultura.- AVA-Asaja cifra en 134 millones las pérdidas de los citricultores por el desplome de precios

Actualizado: lunes, 29 diciembre 2008 17:29

Aguado lamenta los "extraordinarios" aumentos de precios sufridos por los agricultores y pide medidas contra la inseguridad en el campo

VALENCIA, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Asociación Valenciana de Agricultura (AVA-Asaja), Cristóbal Aguado, manifestó hoy que los citricultores acumulan pérdidas por valor de 134 millones de euros a consecuencia del "abuso del poder en la imposición del precio de las grandes áreas de la distribución", hecho que, a su juicio, "está matando al sector productor de cítricos" de la Comunitat, mientras "las administraciones no están a la altura".

Aguado se pronunció en estos términos durante la rueda de prensa convocada para hacer balance agrario y ganadero de 2008, ejercicio cuyo resultado "está muy lejos de ser lo que querríamos", apuntó el presidente de AVA, quien recalcó que la situación actual del sector debe "hacer reflexionar", dado que "está aumentando el abandono de campos, están desapareciendo muchas personas del mundo agrario y se incorporan muy pocos jóvenes, y eso está poniendo en una situación verdaderamente difícil el futuro de la agricultura valenciana", dijo.

En cuanto a las pérdidas, precisó que la venta de las primeras 600.000 toneladas de clementinas, mayoritariamente clemenules, a una media de 0,12 euros por kilo por debajo de los costes hizo perder a los agricultores 72 millones de euros, y la de las primeras 700.000 toneladas de naranjas Navelina, con un déficit acumulado de 0,06 euros por kilo, supondrá que el citricultor sufra una merma en sus rentas de 42 millones de euros.

Además, se unen las provocadas por la pérdida de "prácticamente el 100 por ciento de la cosecha en muchos campos" de clementinas (Oroval, Marisol, Mioro, Loretina, Oronules, Nules y Orograndes) "a consecuencia de las lluvias y de la excesiva madurez", lo que supone otros 20 millones de euros, hasta alcanzar el total de 134 millones, cantidad que "los agricultores han pagado para cuidar y criar las cosechas hasta ahora, que han perdido y que no podrán volver a los cultivos el año que viene", lamentó.

Resaltó que "naturalmente, cuando hay pérdidas, no hay ganancias", de modo que "el agricultor ha trabajado gratis y no podrá hacer frente a los gastos crecientes de la campaña que viene". "Cualquier empresa que tiene esas pérdidas y vende por debajo de los costes está condenada a la desaparición y nos debe hacer reflexionar", insistió.

Cristóbal Aguado planteó que mientras los salarios e impuestos "suben todos los años" y "la contribución y la fiscalidad se mantienen", los precios que perciben los agricultores y los de los productos agroalimentarios perecederos "van a la baja", lo que consideró "un despropósito en una situación de crisis".

"PRODUCTIVIDAD" Y "PRECIO DIGNO"

Recalcó que "para salir de la crisis tiene que haber una productividad de calidad, y un precio digno y justo" y que, por el contrario, "en este momento las grandes superficies europeas están impidiendo que el sector agrario sea como siempre ha sido, motor de reinicio de la actividad económica y de la posibilidad por tanto de salir de la crisis".

Se refirió asimismo a los "aumentos extraordinarios" registrados este año, como en el caso de los fitosanitarios, que pasó del 8 al 102 por ciento; el de los fertilizantes, del 36 al 234 por ciento; el gasoil agrícola, que alcanzó un aumento del 60 por ciento en momentos de uso masivo; o la luz eléctrica necesaria para extraer agua subterránea, que incrementó su coste un 40 por ciento en los últimos cinco meses por la liberalización de las tarifas, y hasta un 50 por ciento para las comunidades de regantes que no formalizaron nuevos contratos, debido al recargo sumatorio de un 5 por ciento aplicado todos los meses.

Sobre este punto, afirmó que "no es verdad" que exista "un libre mercado de la energía" y se preguntó por qué "si las grandes empresas españolas pueden contratar la energía en Francia", donde es "mucho más barata", los agricultores "no pueden" hacerlo. "Si hay libre mercado, o es de verdad o que no nos engañen", sentenció.

PAPEL DE LAS ADMINISTRACIONES

En cuanto al papel de las administraciones ante la grave crisis que sufre el sector y que provocará "una gran protesta" cuando "el daño supere en mucho a los productores", Aguado lamentó la "inapropiada" respuesta del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural, al limitarse a contestar por carta a la petición de una reunión urgente con la ministra Elena Espinosa y remitir la cuestión al secretario general del departamento, Josep Puxeu, lo que, a su juicio, "contrasta con la atención prestada a otros sectores como la banca, la construcción o los automóviles".

Expresó su preocupación por "la complicidad de los burócratas comunitarios de Bruselas" con la "destrucción del mercado" por parte de los grandes operadores comerciales, y señaló que "cada vez Bruselas está más lejos de Valencia, la Europa única para nosotros es menos única, y la burocracia se nos come más y está más lejos de la realidad, porque efectivamente --agregó-- la administración comunitaria, y por escala, la nacional y las autonómicas, tienen la obligación de estudiar y de aplicar las medidas necesarias".

Por otro lado, lamentó la "creciente" inseguridad existente en el campo y se refirió a los últimos incidentes en los que varios agricultores resultaron gravemente agredidos en sus propiedades, al tiempo que reclamó "una acción conjunta de todas las administraciones para garantizar mayor seguridad en el campo y que el Gobierno se decida, de una vez por todas, a promover cambios en el Código Penal para endurecer este tipo de delitos".