VALLADOLID, 17 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Castilla y León recomendó hoy a los titulares de cotos y a los cazadores que no consuman ninguna de las piezas abatidas durante la media veda, que se abrió el pasado miércoles, día 15 de agosto.
Según informó hoy el portavoz del Gobierno y consejero de la Presidencia, José Antonio de Santiago Juárez, se trata de una medida preventiva aconsejada por la Consejería de Sanidad ante el inicio el próximo lunes, 20 de agosto, de una nueva actuación contra la plaga de topillos basada en la aplicación del tratamiento químico autorizado para acabar con los roedores, la clorofacinona, que se extenderá en los lugares en los que se sitúan los reservorios, con especial incidencia en las cunetas y linderos.
Tras reconocer que la aplicación de este producto con mayor profusión no hará posible garantizar la absoluta seguridad en la salud de las personas, De Santiago Juárez insistió en la recomendación de la Junta para que no se consuma ninguna de las especies cinegéticas que sean abatidas durante la media veda, una medida que ya se adaptó en el mes de febrero para el consumo de pichones cuando se inició el primer tratamiento químico experimental en la provincia de Palencia.
En este sentido, el portavoz de la Junta hizo especial hincapié en la necesidad de que cumplan este recomendación aquellas personas que padezcan enfermedades congénitas o adquiridas de la coagulación o que estén sometidas a un tratamiento anticoagulante, como el Sintron, la Aspirina o Indometacinas, debido al efecto anticoagulante de la clorofacinona.
Dicho esto, José Antonio de Santiago Juárez aprovechó la ocasión para aclarar que se trata de un mensaje de prevención de la salud a pesar de que los estudios realizados por la Consejería de Sanidad han avalado la "baja posibilidad" de que la clorofacinona pudiera llegar al consumo humano en dosis suficientes para causar problemas de salud. "El riesgo es mínimo", insistió.
Asimismo, el portavoz de la Junta de Castilla y León, que aclaró que en ningún momento se está prohibiendo la actividad deportiva de la caza sino el consumo de las piezas abatidas, recordó que desde hace años no está permitida la comercialización de los animales abatidos en la media veda ni en establecimientos de restauración ni en tiendas minoritas.
En este sentido, la Agencia de Protección de la Salud y Seguridad Alimentaria perteneciente a la Consejería de Sanidad intensificará las inspecciones en restaurantes y comercios minoristas para verificar el origen de las piezas de caza que se estén poniendo a disposición de los consumidores con el objetivo de garantizar que no proceden de la media veda.
Las recomendaciones realizadas hoy por la Junta de Castilla y León se extienden también a las personas que manipulen el producto químico autorizado contra los topillos para que eviten el contacto de la clorofacinona con la piel a través del uso de guantes. Además, se tendrá que almacenar este producto en armarios bajo llave, fuera del alcance de los niños y lejos de alimentos, bebidas y piensos.
Del mismo modo, se aconseja que una vez se haya manipulado el producto se proceda al lavado de aquellas partes del cuerpo que pudiesen haber estado en contacto con la clorofacinona. En este sentido, De Santiago Juárez recordó que deberán adoptar una especial precaución las personas que padezcan enfermedades congénitas o adquiridas de la coagulación o que estén sometidas a algún tratamiento anticoagulante.
