PALMA DE MALLORCA, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno central destinará alrededor de 60 millones de euros a la mejora de los sistemas de regadío de Baleares durante el periodo 2006-2007, que beneficiarán a unos 1.000 payeses y afectará a unas 1.800 hectáreas de terreno que hacen uso de recursos públicos destinados al ahorro del agua en el sector agrario, a fin de potenciar una agricultura "moderna y sostenible".
El secretario general de Agricultura, Josep Puxeu, señaló hoy en Palma que el Gobierno no concibe un país, y menos, un archipiélago, sin la presencia del sector agrícola, pero precisó que el objetivo de su Departamento es desarrollar un "modelo rural basado en medidas legislativas que lo hagan sostenible y que garanticen una buena gestión de los recursos públicos".
En este sentido, anunció que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) practicará una "discriminación positiva" en el campo para que la agricultura integrada (que promueve las buenas prácticas de cultivo) se generalice. "Debemos promover una gestión óptima en el campo, para que los fondos públicos dirigidos a esta actividad sigan mereciendo nuestra atención y la de los consumidores", señaló.
Por otra parte, Puxeu destacó que el MAPA, en cofinanción con el Govern, contribuirá a la preservación de los olivos de las islas, una actuación dirigida al "mantenimiento del ecosistema para evitar la erosión de estos árboles", detalló.
El secretario general de Agricultura recalcó que en la actualidad, es una cuestión de "exigencia" las buenas prácticas en el sector agrario, "si no queremos que proliferen medidas como el recorte a las ayudas a la exportación de productos agrícolas", indicó.
En otro sentido, Puxeu avanzó que el MAPA trabaja para el desarrollo de un observatorio de precios que permita "establecer unos parámetros" que fijen los precios de los productos agrícolas, porque, añadió, en una Comunidad como Baleares existe una diferencia "abismal" entre los precios que marcan los productores y el que se fija en el mercado".
