Economía/Agricultura.-Junta de CyL dice que el acuerdo con Ebro y Acor es la mejor solución para el cultivo de remolacha

Actualizado: viernes, 14 marzo 2008 16:06


VALLADOLID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, insistió hoy en que el acuerdo suscrito esta semana con las empresas azucareras Ebro y Acor para la reestructuración del sector remolachero-azucarero es la mejor solución para garantizar la viabilidad y la continuidad del cultivo de la remolacha en la comunidad autónoma de Castilla y León puesto que "la llave" de los recursos económicos la tienen precisamente las empresas.

De este modo respondió Silvia Clemente a las críticas unánimes de las organizaciones profesionales agrarias (OPA) de Castilla y León que, además de lamentar que este acuerdo llega "muy tarde", censuraron que se haya hecho a espaldas del sector favoreciendo en todo momento los intereses de las industrias, especialmente de Ebro.

Clemente, que hoy se reunió con los responsables de las cuatro organizaciones agrarias con presencia en Castilla y León (Asaja, UCCL, UPA y COAG) para explicarles los detalles del acuerdo firmado el pasado lunes con Ebro y Acor, destacó que este pacto ofrece un "panorama de estabilidad de precios", 40 euros por tonelada como mínimo desde la campaña 2008-09 hasta la 2013-14, que no existía hasta la fecha y que consideró "clave y fundamental" para asegurar la permanencia y la competitividad del cultivo.

Del mismo modo, destacó la mediación de la Junta para conseguir un acuerdo entre Ebro y Acor para llevar a cabo la reducción adicional de 24.772 toneladas de la cuota, un aspecto "necesario" para alcanzar el recorte 50 por ciento de la producción establecido por la UE para que el sector pudiese obtener ayudas. "Si no se hubiera reducido el 50 por ciento de la producción de azúcar en España no habría ayudas europeas", sentenció la consejera, que cifró estas ayudas en unos 220 millones de euros para Castilla y León de los que 60 millones irán a parar a manos de los remolacheros en función de cómo cierren la petición de abandono.

En este sentido, insistió en su mensaje de que los agricultores de Castilla y León no habrían percibido "ni un sólo euro" si Ebro y Acor, de la mano de la Junta, no hubieran pactado la reducción del 50 por ciento de su producción de azúcar, "una potestad y una decisión, porque así se lo ha atribuido la reforma europea, de las dos empresas", aclaró la consejera, que calificó este acuerdo de "razonable" para permitir la supervivencia de Acor, que ahora podrá mantener su cuota de azúcar en términos de competitividad.

PIDE UN MENSAJE ADECUADO Y DE FUTURO.

Dicho esto, la consejera de Agricultura hizo un llamamiento a los responsables de las OPA para que eviten conclusiones "incorrectas" y transmitan un mensaje adecuado a los cultivadores de remolacha de Castilla y León en el sentido de que el acuerdo suscrito con Ebro y Acor, que, según recordó, ya está cerrado, es una garantía de futuro para la Comunidad Autónoma.

Clemente, que reconoció que el pacto entre Junta, Ebro y Acor ha sido fruto de una "larguísima y compleja negociación" en la que, según aseguró, se ha tenido en cuenta la opinión de las OPA fruto de ocho reuniones anteriores, defendió que se trata de "un gran acuerdo" que "enriquece" a Castilla y León y que sitúa a la Comunidad en un panorama de certidumbre sobre el precio, al mismo tiempo que garantiza que no se van a cerrar más fábricas en la Región, más allá de la de Acor en Valladolid, que llevaba dos campañas sin molturar, y la de Ebro en Peñafiel, también en la provincia vallisoletana.

Por todo ello, la consejera, que destacó que Castilla y León se mantendrá en una situación de "liderazgo" en la producción de azúcar en España, se mostró convencida de que a partir de este acuerdo la región tendrá "todas las oportunidades" para trabajar en los próximos años para ser más eficiente en la producción, aspecto al que, según recordó, irá dirigida la aportación de la Junta.

Sin embargo, los responsables de las organizaciones profesionales agrarias se mostraron especialmente críticos con la situación en la que quedará el cultivo en Castilla y León para el que reclamaron un precio mínimo de 42 euros por tonelada de remolacha que, aún así, aseguraron estaría en el límite de la rentabilidad en algunas zonas.

Así el coordinador de la Unión de Campesinos en Castilla y León (UCCL), Jesús Manuel González Palacín, manifestó el "cabreo generalizado" del sector ante un "acuerdo mejorable" que, según advirtió, pone a los remolacheros en una situación "muy difícil" que, según auguró, optarán por otros productos para el futuro.

González Palacín advirtió a la Junta de que tendrá que dar muchas explicaciones por haber dejado en manos de Ebro y de Acor el día a día de un acuerdo en el que "hay muchos puntos sin especificar", como de dónde van a salir los 9 euros que va a poner la industria para complementar el precio de la remolacha o si los 2,3 euros previstos para la próxima campaña corresponden a los derechos consolidados por los cultivadores en relación a la pulpa.

Por su parte, el presidente regional de Asaja, Donaciano Dujo, lamentó que el acuerdo suscrito entre la Junta, Ebro y Acor no haya contemplado ninguna de las reinvidicaciones planteadas por los productores, como el precio de la remolacha, un 'pago único' que evitase los años de referencia que, según advirtió, obligarán a sembrar esta campaña para poder cobrar las ayudas o el acuerdo de abandono del sector contemplado en el AMI.

Dujo informó de que su sindicato aprovechará la reunión de la Mesa Zonal del próximo lunes para pedir explicaciones a Ebro sobre las condiciones de contratación de esta campaña que, según advirtió, si van en la misma línea de la anterior reunión no serán aceptadas "porque no dan las condiciones agronómicas de precios suficientes para hacerlo rentable, ni este año ni mucho menos en un futuro".

Mientras tanto, el secretario regional de UPA, Julio López, fue tajante en sus críticas y, tras asegurar que el acuerdo entre Junta y las dos industrias "no es nuestra reestructuración", lamentó que Ebro haya logrado imponer sus intereses en unas "condiciones leoninas" para los remolacheros y aplicando la reforma de la OCM del azúcar en el año que ha querido. Del mismo modo, se preguntó el motivo por el que la cooperativa Acor ha decidido firmar el acuerdo con la Junta y con Ebro "por mucho interés que tuviera en mantener las 120.000 toneladas de cuota para la fábrica de Olmedo".

A su juicio, se ha perdido una "oportunidad de oro" para aplicar una reestructuración del sector que, según advirtió, ya era "pésima" para los productores. "La responsabilidad recaerá en la consejera de Agricultura a nivel político y en Ebro a nivel industrial porque el cultivo de la remolacha con esta reestructuración posiblemente desaparezca en Castilla y León", sentenció.

Por último, Miguel Blanco, integrante de la Ejecutiva nacional de COAG, explicó que el primer problema de este acuerdo radica en el hecho de que se haya fijado la campaña 2009-2010 para la reestructuración de la fábrica de Ebro en Peñafiel, y no la 2008-2009 como pedían las OPA, ya que dejará un precio de 36,5 euros por tonelada de remolacha, "muy por debajo" de lo que pidieron las OPA, al menos 42, en lo que consideró, además, una "falacia" amparada por la consejera de Agricultura, a la que acusó de aplicar un sobreprecio con la ayuda destinada a la reestructuración y a la amortización de la remolacha que desaparece.

Blanco criticó también que la "mala previsión o la desidia" en la aplicación del plan de reestructuración del sector remolachero-azucarero en Castilla y León derive a Andalucía 8.700 toneladas de derechos que, previsiblemente, saldrán de la planta de Ebro en La Bañeza (León). "Son 2,5 millones de ayudas suplementarias a la reestructuración que van a cobrar los cultivadores de remolacha del sur y pierden los del norte cuando realmente donde esa remolacha se pierde es en el norte y no en el sur", concluyó.