VALLADOLID, 2 May. (EUROPA PRESS) -
Las ventas de los vinos con denominación de origen (D.O.) de Castilla y León (Ribera del Duero, Rueda, Cigales, Toro y Bierzo) crecieron un 10 por ciento en 2007 hasta alcanzar un 15,9 por ciento de cuota de mercado sobre el total de los caldos con D.O., según el Informe Anual sobre la Evolución de los Vinos con D.O. elaborado por Nielsen.
Según explicó el director de Nielsen, Ignacio Lauroba, este aumento del 10 por ciento en las ventas de los vinos con denominación de origen de Castilla y León es un hecho "muy importante" ya que el incremento de las ventas de los caldos con D.O. en general fue tan sólo del 1 por ciento.
"Crecer hasta el 15,9 por ciento (de cuota) es realmente espectacular", insistió Lauroba, que destacó el hecho de que ninguna otra comunidad autónoma española haya experimentado una evolución tan positiva.
Así, los vinos de Rioja, que siguen manteniendo un "liderazgo hegemónico" en este sector, crecieron un 1 por ciento hasta alcanzar una cuota de mercado del 39,5 por ciento, frente a los vinos de Castilla-La Mancha, Galicia, Cataluña y Valencia, con caídas del 4, 5, 4 y 3 por ciento, respectivamente, y cuotas del 11,6; 5,7; 5,7 y 4,2 por ciento.
Por su parte, los vinos con D.O. de Navarra se mantuvieron invariables (7,3 por ciento de cuota de mercado) y los caldos de calidad de Aragón crecieron un 6 por ciento (5,3 por ciento de cuota de mercado).
Según explicó Ignacio Lauroba, el incremento de ventas de los vinos con D.O. de Castilla y León está sustentado por el desarrollo en los dos principales sectores de comercialización: la hostelería y la restauración.
Concretamente, en hosteleríla alcanzan ya el 18,3 por ciento de cuota de mercado con un incremento del volumen de ventas del 6 por ciento, y en alimentación, la cuota de mercado de los vinos castellanoleoneses era tradicionalmente más baja si bien ya ha alcanzado un 12,7 por ciento de cuota tras un "elevado" incremento del 18 por ciento.
Por denominaciones de origen, los "magníficos resultados" de ventas registrados en 2007 situaron a Ribera del Duero como la segunda D.O. en el mercado interior, con una cuota de penetración del 8 por ciento y un incremento de las ventas en el último año del 11 por ciento. Según los datos de este estudio, este crecimiento fue igual de importante tanto en el sector de la alimentación como en la hostelería.
INCREMENTO DEL CONSUMO DE LOS BLANCOS.
Los vinos de la D.O. Rueda, por su parte, superaron en cinco puntos la participación de mercado hasta alcanzar un 5,1 por ciento con un incremento de sus ventas del 10 por ciento común en los dos sectores de distribución.
De las otras tres denominaciones de origen de Castilla y León, con cifras de comercialización menores, destacó el incremento del 11 por ciento en las ventas de los caldos del Bierzo tanto en hostelería como en alimentación y alcanzaron una cuota de mercado del 1,2 por ciento.
Por su parte, el crecimiento de los vinos de Toro, con una cuota de mercado del 1,0 por ciento, fue sólo del 2 por ciento y centrado exclusivamente en el sector de la alimentación mientras que los vinos de Cigales (cuota del 0,6 por ciento) crecieron también un 2 por ciento, pero en este caso centrado sólo en el sector de la hostelería y no en la alimentación.
Tras destacar que el incremento de las ventas de los vinos con D.O. de Castilla y León no se ha hecho trivializando los precios "si no todo lo contrario, lo que tiene bastante mérito", el director de Nielsen precisó que los "excelentes resultados" de los caldos de calidad castellanoleoneses han sido consecuencia de la "perfecta diversificación" en la tipología de los consumidores y en los momentos de consumo.
A su juicio, la distribución y la promoción han sido otros "dos ejes fundamentales" en la evolución de los vinos con D.O. de Castilla y León así como la adaptación de la oferta al gusto de los consumidores de vino de un cierto nivel de precio medio o medio alto, además de recoger la tendencia positiva hacia los vinos blancos, con un incremento del 5 por ciento en su consumo, "y todo ello sin perder valor", insistió.
Por su parte, la consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, Silvia Clemente, alabó los "magníficos resultados" de este informe para los vinos castellanoleoneses que, según recordó, han apostado por la calidad. Así, informó de que las ventas de vino con D.O. en Castilla y León se han triplicado entre los años 1995 y 2007 hasta alcanzar más de 90 millones de botellas.
Castilla y León, con 75.000 hectáreas de viñedo, cuenta con un 65 por ciento de superficie dedicada a los vinos con denominación de origen. En este sentido, la consejera destacó el importante aumento de la inversión en el sector vitivinícola con más de 452 millones de euros destinados a nuevas bodegas o a la modernización de las ya existentes de los que 67 millones fueron aportados por el Gobierno regional.
Tras insistir en su "satisfacción" por el "posicionamiento cada vez más destacado" conseguido por los consejos reguladores de las D.O. de Castilla y León, con especial atención a la diversificación de las variedades autóctonas, Clemente reconoció que todavía queda camino por recorrer y trabajo por desarrollar por lo que destacó la importancia del plan de promoción de la alimentación que llevará a cabo el Gobierno regional "como una oportunidad para atender una mayor demanda en el futuro".
