SANTANDER, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Banco Santander, Emilio Botín, aseguró hoy que la crisis financiera en España casi ha pasado pero que a la económica todavía le queda un poco para recuperarse, ya que es como un niño cuando enferma, que al principio tiene fiebre muy alta pero luego se va recuperando.
El ajuste fuerte de la economía es como "el catarro de un niño, que llega de golpe y con fiebre muy alta, pero que luego pasa rápido", destacó Botín en un encuentro previo con la prensa antes del inicio de la junta de accionistas en Santander, donde no quiso precisar cuánto tardará la economía en recuperarse, aunque adelantó que podrían ser unos dos años.
Asimismo, durante su intervención en la junta, Botín reconoció que la economía española está evolucionando de una forma peor de lo esperada y que ha entrado en una fase de "significativa caída de la tasa de crecimiento", que está afectando a la confianza de los consumidores y a la creación de empleo.
Sin embargo, confió en que la fase negativa "no será larga" porque, a su juicio, la economía española dispone de puntos de apoyo que no tenía en ciclos anteriores, unas cuentas publicas saneadas, un sistema productivo más flexible y contactos con un sistema empresarial mas dinámico, diversificado y con mas presencia internacional, ya que las empresas han multiplicado por siete sus activos en el exterior en la ultima década.
No obstante, destacÓ que caben medidas que permiten mejorar la productividad y la competitividad. Asimismo, reconoció que la situación económica está afectando a la morosidad del sector y del banco, y que va a aumentar en los próximos meses, aunque en España se parte de una tasa inferior a la mitad de la media europea y los créditos disponen de "muy amplias garantías".
Asimismo, valoró de manera muy positiva "la excelente calidad de la supervisión y regulación prudencial" del Banco de España y destacó que "contar con un sistema financiero fuerte y solvente es una de las mayores garantías para el futuro de nuestra economía".
NO DESCARTA UNA OPERACIÓN SOBRE EL SOVEREIGN.
En este sentido, también destacó durante su intervención que en general la estabilidad que ha caracterizado a los mercados internacionales en estos meses comienza a mostrar síntomas de mejora y que, aunque las tensiones financieras se están dejando notar sobre el crecimiento económico en la mayoría de las economías desarrolladas, el impacto positivo de la globalización va a significar un "claro soporte" en el futuro al crecimiento global.
Sin embargo, destacó que en Estados Unidos la crisis financiera aún no ha pasado porque todavía quedan activos tóxicos por salir, a lo que se une, según los expertos, una posible recesión.
A pesar de esta situación el presidente de la entidad destacó que el banco cuenta con una sólida e importante posición en este país, aunque no quiso adelantar si piensa llevar a cabo alguna operación en el Sovereign, banco estadounidense donde controla el 24,4%.
Según el acuerdo firmado con la entidad norteamericana, a partir del 1 de junio de 2008 y hasta el 31 de mayo de 2011, Santander tiene la opción de realizar una oferta por la totalidad del Sovereign, sujeta a ciertas condiciones y limitaciones acordadas por ambas partes.
Sin embargo, Botín señaló que por el momento no se plantean operaciones porque "todavía tiene dos años" de plazo para decidir su estrategia futura en el banco, aunque en el caso de que el consejo del Sovereign se lo pida, no descarta esta posibilidad.
Botín también resaltó que el Santander es el banco más eficiente de entre los primeros 25 del mundo y que su posición en el exterior evoluciona de una manera excelente, principalmente en Alemania, Brasil y Reino Unido, donde tiene un negocio de hipotecas de calidad y bajísima morosidad.
Concretamente, en caso de que el Banco Santander formulara la oferta de compra por la totalidad del Sovereign, el consejo de administración de la entidad estadounidense podrá contrastarla mediante un procedimiento de subasta o de valoración competitiva.
Si llegaran a determinar que no hay ninguna oferta más alta, el consejo de la entidad estadounidense deberá aceptar dicha oferta, teniendo en cuenta que cualquier oferta que realice el Santander debe suponer, al menos 38 dólares por acción.
