BARCELONA, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) empezó anoche a inventariar, acondicinar, proteger y supervisar el cableado de las instalaciones de seguridad y control de tráfico de los accesos a Barcelona, en una actuación que continuará en los próximos días.
El objetivo es limitar el riesgo de averías como las que provocaron los operarios que trabajan en las obras del tren de alta velocidad en la estación de Sants los días 19 y 20 de septiembre, con retrasos de hasta una hora en todos los trenes.
Es la primera medida tomada por el Comité de Coordinación Permanente formado por técnicos de Renfe y Adif y constituido esta semana tras los incidentes del último mes. Su objetivo es "optimizar" la actuaciones de ambas empresas en "situaciones de excepcionalidad" como la construcción del AVE.
El inventario será especialmente intensivo en los tramos L'Hospitalet-Torrassa y Torrassa-Sants, por su "especial complejidad" y porque en esos puntos las obras de construcción del tren de alta velocidad se desarrollan muy próximas a la plataforma de vías de ancho ibérico.
Otra de las medidas anunciadas es la elaboración de un plan para que los viajeros estén mejor informados en caso de incidencia.
