MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
La industria envasadora y refinadora de aceite de oliva afirmó hoy que la oferta de los productores de aceite es el principal dato para fijar el precio final del producto y advirtió de que los agricultores están poniendo dificultades al abastecimiento para subir los precios.
"Queremos hacer una llamada de atención porque se están produciendo en este momento por parte de la producción, dificultades de abastecimiento, claramente con el fin de elevar los precios", aseguró.
La Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac) reaccionaba de esta forma a las acusaciones vertidas ayer desde las organizaciones COAG, UCE y CEACCU, que la tachan de responsable de la subida de precio del aceite de oliva, junto a la gran distribución.
Los envasadores de aceite sostienen que la oferta de los agricultores es el principal dato para poder fijar el precio final y que, precisamente, en la campaña pasada "fueron sus estimaciones erróneas las que provocaron una subida del precio en origen por encima del 70%", mientras que la industria sólo repercutió en sus precios un alza del 40%.
Anierac argumenta que el informe presentado ayer por las tres organizaciones "ofrece datos inciertos, irresponsables y alarmistas con el fin de celebrar las bodas de plata de COAG", como que el coste de producción del aceite de oliva sea 3,06 euros por kilo, cuando hay informes que lo establecen en 1,30 euros.
La asociación precisa además que las existencias de aceite en poder de los envasadores no alcanzaba a finales de junio las 130.000 toneladas, según los registros de la Agencia para el Aceite de Oliva, mientras que los productores tenían casi 400.000. "Las cifras del sector están auditadas, es sorprendente que alguien se atreva a tergiversarlas", dice.
También recuerda que los oleicultores españoles reciben 1.000 millones de euros de la UE en concepto de ayudas, "que al sector productor no le gusta mencionar, pero que si hablamos de transparencia conviene tener presente". "Estamos ante un nuevo intento de manipular la realidad por parte de la producción", asevera.
En este sentido, insiste en que "la industria siempre ha defendido la estabilidad de los precios, asumiendo parte del coste de la subida en origen para intentar evitar una caída tanto en el consumo interno como en las exportaciones, mercado en el que existe gran competencia y en el que una bajada de cuota es difícil de recuperar.
Anierac alega que la industria exige la transparencia en el mercado y no tiene ningún interés en un incremento de precios que al final repercute en una caída del consumo, que luego resulta difícil de restablecer.
