MADRID, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
Corporación Financiera Alba contará con un cuarto puesto en el consejo de administración de ACS, donde ocupará la vacante que el presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, dejó al dimitir de su cargo de consejero externo independiente el pasado mes de octubre.
El nuevo consejero de Alba en ACS, nombrado hoy por el consejo la constructora, es Francisco Servando Verdú Pons, actual consejero delegado de Banca March y consejero de Corporación Financiera Alba, informó ACS a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Esta entidad controlará así cuatro de los 18 miembros que actualmente integran en el máximo órgano de gestión de la compañía de construcción y servicios que preside Florentino Pérez. Sus otros tres representantes son Pablo Vallbona, Isidro Fernández y Santos Martínez-Conde Gutiérrez.
Corporación Financiera Alba eleva el número de consejeros en ACS poco después de comunicar que controla el 20,2% del capital social de la empresa de la que es primer socio por delante de los empresarios Alberto Cortina y Alberto Alcocer, que conjuntamente tienen un 11,07%, y del propio presidente, con un 7,64%.
Con la concesión de un nuevo puesto a Corporación Financiera Alba, el consejo de la constructora cubre además la vacante dejada por el presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, quien dimitió de su cargo de consejero externo independiente después de que ACS comprara el 22% de Unión Fenosa, dado que también está presente en el máximo órgano de administración de Endesa.
Blesa, que en Endesa representa los intereses de Caja Madrid, propietaria del 9% de la eléctrica presidida por Manuel Pizarro, atribuyó su renuncia al sillón de consejero de ACS a "motivos éticos" y a su intención de "no producir más inquietud en el sector" ni "situaciones de tensión entre las compañías".
El presidente de Caja Madrid formaba parte del consejo de ACS desde su nacimiento como grupo de construcción a raíz de la fusión con Dragados. El presidente Caja Madrid fue uno de los tres independientes que entraron en el consejo de Dragados cuando en abril de 2002 ACS compró al Santander el 23,5% del capital de su entonces competidora.
Tras la fusión de las dos empresas, cerrada en diciembre de 2003, se mantuvo en el máximo órgano de gestión de la empresa resultante con condición de externo independiente.
