Cree que la empresa, antes de iniciar nuevos proyectos, "deberá actualizar lo ya existente"
BILBAO, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Muskiz, Gonzalo Riancho, afirmó hoy que, en ningún momento, "se le ha pasado por la cabeza" a él, ni a su partido (EA) pedir el "inmediato cierre" de Petronor, pero aseguró que la compañía debe "cumplir la ley".
De esta manera, se refirió, en un comunicado, a la situación creada el pasado viernes cuando la Junta de Gobierno local aprobó la presentación de once alegaciones al expediente de Autorización Ambiental Integrada (AII) de la planta, un permiso que otorga el Gobierno vasco.
El informe municipal fue aprobado con los votos de EA y el rechazo de su socio de Gobierno, el PSE. En el mismo se detectaban varias "irregularidades" legales en el funcionamiento de las instalaciones y se abogaba por su "progresiva puesta en situación de fuera de servicio".
El alcalde de Muskiz, que hoy recibió al comité de empresa de Petronor para informarles de la situación, aseguró ser "plenamente consciente" de la "gran importancia económica y social" que tiene Petronor para el municipio, Vizcaya y toda la Comunidad Autónoma vasca.
"En ningún momento, como se ha llegado a afirmar alegremente, nos ha pasado por la cabeza ni a mí ni a mi grupo político pedir el inmediato cierre de sus instalaciones. Se nos quiere presentar como enemigos del progreso y querer convertir en un erial una industria que crea riqueza, cuando simplemente queremos que las leyes se apliquen de la misma forma a todos los vecinos de Muskiz", señaló.
El alcalde afirma ser consciente de su obligación de "velar" por la seguridad y el bienestar" de todas las personas que viven en Muskiz, "sean trabajadores o no de Petronor", y de cuidar por el cumplimiento de la legalidad vigente.
En este sentido, indicó que "velar por la salud" de la ciudadanía de Muskiz respetando esa legalidad "no es ir en contra del progreso y la industria, sino todo lo contrario".
En cuanto al proceso administrativo de la Autorización Ambiental Integrada (AAI), explicó que el Departamento de Medio Ambiente del Gobierno vasco les remitió la documentación presentada por Petronor para iniciar la fase de alegaciones.
El alcalde explicó que, dado que los servicios técnicos y jurídicos propios son "insuficientes" para anallizar dicha documentación, se encargó a dos consultoras especializadas sendos informes sobre el contenido de la misma.
"CARENCIAS"
Riancho afirmó que, de los análisis y conclusiones de las consultoras, se deduce que hay "ausencias, carencias, lagunas o información escasa" sobre aspectos importantes del funcionamiento de las instalaciones existentes en Petronor.
En este sentido, manifestó que las alegaciones que la Junta de Gobierno acordó enviar al Gobierno vasco "van en el sentido de hacer constar dichas carencias para que se aclaren, se subsanen o corrijan". "Petronor debe respetar la legislación vigente, como la respetan el resto de vecinos de Muskiz", aseguró
"De cualquier forma, se trata de unas alegaciones que se deben estudiar, analizar, etc..., por el organismo competente, que deberá decidir, oídas las partes. Si son razonables, legales y tienen sentido, es evidente que se deberá responder adecuadamente a las alegaciones presentadas tanto por el Ayuntamiento como partidos políticos, asociaciones y particulares, siempre con el objetivo lógico de preservar la salud y el bienestar de las personas, y dentro de la más absoluta legalidad", añadió.
Asimismo, expresó su preocupación porque a la plantilla de Petronor se les haya transmitido, "de forma retorcida y malintencionada" que el Ayuntamiento quiere cerrar las instalaciones.
Además, aseguró compartir la opinión de algunos trabajadores de que, antes de iniciar nuevos proyectos, la empresa "deberá actualizar lo ya existente".
"Todos los vecinos tienen que cumplir la ley, desde el más pequeño al más grande. Por lo tanto, Petronor debe cumplir la legislación ambiental en vigor y su responsabilidad es actualizarse, modernizarse y obtener las autorizaciones necesarias. El no hacerlo situaría a Muskiz y su entorno en una situación complicada que nadie desea. El hacerlo, sin embargo, aumentaría el bienestar de la ciudadanía y de los trabajadores de la empresa y evitaría el rechazo social", concluyó.
