Economía/Empresas.- (Ampliación) La junta de Eiffage impide de nuevo la entrada de Sacyr en su consejo

Actualizado: miércoles, 18 abril 2007 21:20

El grupo constructor español anuncia medidas legales contra la validez de la junta


PARÍS, 18 Abr. (del corresponsal de EUROPA PRESS, Salvador Martínez) -

La junta de accionistas de Eiffage rechazó hoy con el 59,40% de los votos en contra el nombramiento de los cinco consejeros propuestos por Sacyr Vallehermoso, primer accionista de la constructora francesa con un 33,2% de su capital y un 29% de sus derechos de voto.

Sacyr anunció al término de la asamblea que llevará a cabo "todos los procedimientos necesarios" para protestar contra la validez de la asamblea de Eiffage, por considerar que se celebró "en condiciones que perjudican gravemente los derechos de los accionistas".

Para el grupo que preside Luis del Rivero, es "ilegal" la decisión del presidente de Eiffage, Jean François Roverato, de cancelar los derechos accionistas españoles en la empresa gala, ante sospechas de concertación.

Este hecho, anunciado por Roverato al inicio de la junta, provocó que Del Rivero abandonara la asamblea, aunque un representante de Sacyr continuó en la sala para defender y ejercer los derechos de voto de la compañía en la fase de votación de propuestas.

También anunció acciones contra la junta la inmobiliaria Rayet, otro de los socios españoles de la constructora francesa con un 4,21% del capital, y la más perjudicada por la limitación de derechos de voto. Según indicó, sólo le reconocieron los de 13.000 acciones, frente al paquete de 3,9 millones con que cuenta.

La junta de Eiffage comenzó con una declaración de Roverato en la que anunciaba la suspensión del derecho de voto de 89 accionistas españoles de la sociedad francesa, a los que acusó de actuar de forma concertada con Sacyr. Estos socios suman un paquete de 16 millones de títulos de Eiffage, representativos de alrededor del 18% de su capital.

LA CARTA DE ROVERATO.

El presidente de Eiffage anunció este hecho mediante la lectura de una carta de Jean-Claude Kerboeuf, representante de Eiffaime, sociedad que canaliza la participación del 5% que los directivos de Eiffage tienen en la empresa. En la misiva se daba cuenta de "que existen indicios graves, precisos, y convincentes" de que los 89 accionistas españoles y Sacyr Vallehermoso actuaban "juntos" de manera que preveían ejercer "de forma concertada el derecho de voto de sus acciones".

Tras la lectura de la carta, Christophe Perchet, abogado representante de Sacyr Vallehermoso, intentó manifestar, entre abucheos de los presentes en la junta de accionistas, su oposición al contenido de la misma.

No obstante, ni la oposición de Perchet ni la de los representantes españoles del grupo inmobiliario Rayet logró disuadir a los dirigentes de la empresa constructora gala de su decisión.

El presidente de Sacyr, por su parte, indicó que Roverato había llegado "demasiado lejos" y aseguró que las diferencias entre las dos compañías "acabarían finalmente en los tribunales".

Asimismo, George Terrier, otro de los abogados de Sacyr en Francia calificó la decisión del presidente de Eiffage de "instrumentalización" que hace perder muchos enteros a la democracia accionarial de París. Terrier tachó la decisión de Roverato de ejemplo de "patriotismo económico" y auguró que Sacyr estudiará "todas las medidas para recurrir la decisión" de Roverato.

Por su parte, Fernando Clavijo, representante de los intereses de uno de los 89 accionistas españoles de Eiffage, expresó su "firme oposición" con la forma en la que la junta fue dirigida, al estimarla "ilegal" y "una ofensa a la libertad de mercado".

El presidente de Eiffage declinó realizar comentario alguno respecto a las reivindicaciones de las empresas españolas y sólo insistió en que "la Justicia se pronunciará si tiene que hacerlo" cuando los interesados "se acojan a la ella". "He medido un riesgo que asumo, es un riesgo personal", afirmó el presidente de la constructora francesa.