Economía/Empresas.- Bruselas acusa al productor canadiense de aluminio Alcan de abuso de posición dominante

Actualizado: viernes, 22 febrero 2008 20:01

BRUSELAS, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea acusó hoy formalmente al productor canadiense de aluminio Alcan de abuso de posición dominante por obligar a los clientes que quieren adquirir su tecnología de fundido de aluminio, dominante en el sector, a comprar también los equipos de manejo de los fundidores que fabrica su filial ECL. Si se confirma esta acusación, Bruselas podría imponer una multa de hasta el 10% del volumen de negocios de Alcan.

El Ejecutivo comunitario dijo el comportamiento de la empresa canadiense podría estar limitando la innovación en el sector de producción de aluminio y tener un impacto negativo para la competencia en el mercado mundial de aluminio, valorado en 70.000 millones de euros, y en todos los sectores de la industria europea que lo utilizan como materia prima.

Alcan fue adquirido por Rio Tinto en octubre de 2007 y, con esta operación, el negocio de aluminio de la empresa resultante, Rio Tinto Alcan, se convirtió en el mayor productor de aluminio del mundo. ECL, una filial de Alcan, es el principal productor de equipos usados en los fundidores de aluminio en todo el mundo.

Las acusaciones de la Comisión están contenidas en un pliego de cargos enviado a la empresa canadiense. El pliego de cargos se centra en los contratos de venta de la tecnología de fundido de aluminio de Alcan, que obligan a los compradores a adquirir también los equipos de manejo de fundidores de aluminio de su filial ECL.

El Ejecutivo comunitario considera que esta cláusula contractual impide a los clientes de Alcan utilizar equipos de manejo de otros fabricantes. Bruselas cree que Alcan es dominante en el mercado de la tecnología de fundido de aluminio y que este vínculo contractual puede perjudicar significativamente a sus clientes y a los usuarios finales al reducir la innovación y favorecer un aumento de precios.

El envío de un pliego de cargos es un paso formal de las investigaciones de la Comisión por problemas de competencia. Ahora, Alcan tiene ocho semanas para responder por escrito a estas acusaciones y puede pedir la celebración de una audiencia para presentar sus argumentos.

Si las acusaciones se confirman, Bruselas exigirá a la empresa canadiense que cese la infracción y podría imponerle fuertes multas.