Se elimina el acta de acuerdo suscrito por el Gobierno y Marsans y se establece que el Estado no podrá perder la mayoría accionarial
BUENOS AIRES, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Cámara de Diputados de Argentina aprobó esta madrugada, hora local, el proyecto presentado por el Gobierno de Cristina Fernández para nacionalizar Aerolíneas Argentinas (AA) y Austral, hasta ahora en manos del grupo español de turismo Marsans, tras más de 13 horas de debate que concluyó con 167 votos a favor y 79 en contra.
La cámara baja aprobó así la iniciativa enviada por el Ejecutivo, que ahora tendrá que pasar al Senado, previsiblemente a principios de septiembre, después de que el oficialista Frente para la Victoria lograra el voto favorable de todos sus legisladores e importantes apoyos en algunos bloques opositores.
El jefe del bloque oficial, Agustín Rossi, valoró la "colaboración de los trabajadores" de la compañía y aseguró que el país transita "hacia un sistema aerocomercial serio", mientras el titular de la comisión de Presupuesto, Walter Agosto, consideró la iniciativa la solución "más concreta y responsable" para salvar las compañías.
El bloque oficialista se aseguró el respaldo necesario para sacar adelante el proyecto después de una serie de negociaciones y de modificaciones al proyecto original, lo que le permitió sumar los respaldos necesarios de varios diputados 'díscolos' y de algunos referentes opositores.
SE ELIMINA EL ACUERDO ENTRE EL GOBIERNO Y MARSANS.
Uno de los principales cambios aprobados por los diputados es la eliminación del acta de acuerdo que habían suscrito el secretario de Transporte argentino, Ricardo Jaime, y los representantes de Marsans, que establecía todo un procedimiento de negociación para que el Estado adquiriera ambas compañías.
Además introdujo nuevas pautas para la recuperación de las dos empresas ya que, en primer lugar, ratificó que será el Congreso el que deberá aprobar el precio de adquisición de las acciones, lo cual no constaba en el acta acuerdo. Además, incluyó una nueva fórmula de tasación de las empresas, distinta de la concebida por Jaime y Marsans.
Otro cambio fue la prohibición del Estado a ceder la mayoría accionarial de las aerolíneas, "la capacidad de decisión estratégica y el derecho de veto". Concretamente, esto significa que el Estado podrá incorporar capitales privados en las compañías, pero no podrán poseer más del 50 por ciento de las acciones.
En contra del proyecto votaron los legisladores de la Coalición Cívica, el PRO, la UCR y el Frejuli, quienes se unieron en un dictamen de minoría, donde plantearon la creación de una nueva compañía para no absorber los pasivos de Aerolíneas Argentinas, valorados en 890 millones de dólares.
El titular del bloque de legisladores de la Coalición Cívica, Adrián Pérez, ratificó durante un encendido discurso que no estaban dispuestos a "convalidar el robo de Aerolíneas Argentinas, perpetrado por el grupo Marsans en connivencia con los funcionarios de la Secretaría de Transporte".
