BARCELONA, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
La compañía textil Dogi aumentó costes laborales un 15% en 2007, debido al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que presentó para 123 trabajadores de su planta de El Masnou (Barcelona) y al aumento de salarios por la inflación, según datos del informe anual de la empresa catalana recogidos por Europa Press.
El ERE de 2007 tuvo un coste para Dogi de 3,9 millones de euros, y la plantilla de El Masnou pasó de los 586 empleados que tenía en diciembre de 2006 a los 340 tras el ajuste. Los afectados recibieron 40 días de indemnización por año trabajado con un máximo de 16 mensualidades o 2.300 euros por año trabajado sin límite.
Dogi gastó un total de cinco millones durante 2007 en indemnizaciones, frente a los 3,8 millones de 2006, año en que la fabricante de tejidos elásticos también presentó un ERE por 99 empleados, para cuyas indemnizaciones provisionó 3,5 millones. El expediente se llevó a cabo en abril de 2007.
El capítulo de 'Otros gastos sociales' pasó de 917.652 euros en 2006 a 1,6 millones en 2007, y los sueldos y salarios pasaron de representar 30,1 millones a 34,7 millones.
En total, Dogi tuvo unos gastos de personal de 48,1 millones en 2007, frente a los 41,8 millones de 2006, y afronta 2008 con nuevas reestructuraciones productivas y de personal, según anunció este mes el consejero delegado de la compañía, Karel Schröder, durante la junta de accionistas.
La nueva fábrica Dogi II unificará desde septiembre --con cuatro meses de retraso-- la producción de El Masnou, Parets y Cardedeu (Barcelona) en la primera localidad, y la fábrica de Filipinas, con 322 empleados, cerrará durante el año. Su producción se repartirá entre las plantas de Dogi en Tailandia y China.
Dogi mantiene las previsiones del plan 2008-2010 de volver a beneficios este año, pese a que cerró 2007 con unas pérdidas de 21,7 millones, frente a los 18,4 millones previstos de números rojos, por el retraso de Dogi II y los menores resultados de Asia (China y Filipinas tuvieron pérdidas).
Asimismo, queda por conocer la repercusión de los costes del cierre de Filipinas en los resultados anuales. Su impacto dependerá de cuánto tarde Dogi en vender la fábrica y la maquinaria del país asiático, cifra con la que espera cubrir y superar los costes de despido del personal y las inversiones de adaptación a la nueva producción de China y Tailandia.
La compañía, fabricante de tejidos elásticos para los mercados de moda íntima, baño y deporte, cuenta también con plantas de producción en Alemania, Estados Unidos y Sri Lanka. Asimismo, tiene delegaciones comerciales en más de diez países.
