Economía/Empresas.- Uno de los ejecutivos de Livedoor admite que la compañía ocultó las pérdidas de la matriz

Actualizado: miércoles, 25 enero 2006 14:00

TOKIO, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

Uno de los ejecutivos de la compañía de acceso a Internet Livedoor, Ryoji Miyauchi, ha admitido que la compañía usó las ganancias de filiales para ocultar las pérdidas, valoradas en 1.000 millones de yenes, de la empresa matriz en el ejercicio fiscal que finalizó en septiembre de 2004, informó hoy el diario japonés 'Yomiuri Shimbun'.

El directivo, que ha sido detenido junto al consejero delegado y otros cuatro ejecutivos de la entidad, está siendo investigado por la Fiscalía japonesa, que cree que la dirección de Livedoor violó la Ley de Acciones y Bolsa al falsificar los informes financieros de la empresa.

Asimismo, la compañía Minato Ward, en la liquidación de sus cuentas del ejercicio fiscal que finalizó en septiembre de 2004, consignó un beneficio neto de 1.400 millones de yenes, después de haber introducido unas ganancias de 2.400 millones de yenes procedentes de sus filiales, según informó el diario japonés.

Miyauchi, que se encargaba de los asuntos financieros de la compañía, reveló además que el presidente y consejero delegado de Livedoor, Takafumi Horie, conocía la existencia de los ajustes ilegales de las cuentas. Horie y Miayuchi dimitieron de sus cargos ayer.

Horie será sustituido como presidente por Kozo Hiramatsu, de 60 de edad, y presidente de la filial de software de Livedoor, Yayoi. Mientras, uno de los miembros del consejo de administración, Fumito Kumagai, representará a Horie en el consejo como accionista de referencia.

Mientras, las acciones de Livedoor prosiguen con su caída en la Bolsa de Tokio desde el martes pasado, hasta situarse en un cuarto de su valor antes del escándalo. Hoy se sitauban en los 137 yenes (1,20 dólares), a pesar de que la Bolsa de Tokio limitó el tiempo de cotización de los títulos de Livedoor a 90 minutos en la sesión de hoy.

El pasado martes, el fuerte volumen de intercambios registrado en la Bolsa de Tokio por la cesión de los títulos de Livedoor colapsó los sistemas informáticos, de forma que la dirección de la Bolsa tuvo que suspender la cotización de todos los títulos 20 minutos antes del cierre. Al día siguiente, el miércoles, la Bolsa de Tokio inició su cotización 30 minutos más tarde de la hora oficial de apertura.