NUEVA YORK, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
La petrolera norteamericana Exxon Mobil ha conseguido inmovilizar activos de Petróleos de Venezuela (PDVSA) por valor de 12.000 millones de dólares (8.382 millones de euros), en el marco de una disputa judicial por la expropiación de activos a la petrolera estadounidense consecuencia la nacionalización petrolera realizada por el Gobierno del país, según informa hoy la prensa norteamericana.
Exxon Mobil señaló que ha recibido órdenes de tribunales en Reino Unido, Países Bajos y las Antillas para inmovilizar de los activos de la petrolera venezolana, según declaró la portavoz del grupo, Margaret Ross.
La compañía también ha obtenido la orden del Tribunal del distrito de Nueva York para la inmovilización de 300 millones de dólares (207 millones de euros) de activos de PDVSA, lo que persigue establecer garantías de reembolso si finalmente ganan el arbitraje.
Estas órdenes se corresponden con el litigio que mantiene la empresa con el Gobierno de Hugo Chávez, que obligó a la petrolera estadounidense a salir de dos 'joint ventures' que mantenía en territorio velezolano, a pesar de que ya estaban firmados los acuerdos, que comprenden la explotación de la Faja petrolera del río Orinoco.
La petrolera norteamericana había solicitado esta congelación para evitar que PDVSA realize movimientos de fondos o ventas de activos antes de que finalice el arbitraje que mantienen pendiente por la expropiación de activos, y argumentan que es necesario mantener los activos que forman parte del litigio en caso de que la compañía venezolana pierda el caso.
Uno de estos acuerdos, el proyecto de 'Cerro Negro', comprende la producción de 1.500 millones de barriles de petróleo en los próximos 35 años y supone la explotación de uno de los yacimientos más grandes del mundo.
Exxon Mobil añadió que dichas órdenas están sujetas a su revisión en los tribunales y que no harán más comentarios al respecto, según explica la CNN.
El pleito forma parte de la lucha de las grandes petroleras occidentales, como la también norteamericana ConocoPhillips, por la expropiación de sus activos en Venezuela. La nueva política energética del país podría perjudicar severamente las cuentas de las petroleras ociidentales que mantenían proyectos en el país.
De hecho, la propia ConocoPhilips redujo considerablemente sus beneficios en 2007 a consecuencia de lo ocurrido en Venezuela y ganó 11.891 millones de euros, un 23,5% menos que en el ejercicio anterior.
La petrolera cifró en 4.512 millones de dólares (3.098 millones de euros) las cargas en su división de exploración y producción en los resultados de 2007 relacionadas con la expropiación venezolana. Sin contar estos extraordinarios, el beneficio anual hubiera alcanzado los 16.403 millones de dólares (11.255 millones de euros).
