MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
El volumen de negocio de las empresas del sector de gestión de impagados crecerá en torno a un 15% en 2010, hasta los 600 millones de euros, debido a la creciente dificultad de recuperación de la deuda, al aumento del volumen de los impagos y al incremento de la externacionalización de las carteras de deuda, según el informe 'Empresas de Gestión de Impagados' publicado por DBK.
El estudio refleja un crecimiento a doble dígito de este segmento desde 2008, que se extenderá a 2011, año en el que empezará a registrarse una ralentización de la actividad.
En concreto, el descenso de la actividad económica y el aumento del desempleo se tradujeron en un "significativo" incremento de la morosidad de las empresa y particulares. En 2008, las empresas dedicadas a esta actividad elevaron su facturación un 22,2% respecto a 2007, alcanzando un volumen de negocio conjunto de 440 millones de euros, mientras que en 2009, los ingresos sectoriales se situaron en los 520 millones de euros, un 18,2% más.
En ese mismo año, la cartera gestionada creció un 35%, hasta 61.000 millones de euros, y la deuda recuperada se situó en 10.500 millones de euros, un 23,5% por encima de la cifra de 2008. De este modo, la tasa de recuperación se situó en el 17%, cerca de dos puntos menos que en el año anterior.
DBK apunta que pese a la mayor dificultad de recuperación de la deuda, el aumento de la morosidad que seguirá produciéndose en un entorno económico desfavorable "incidirá positivamente en la actividad de las empresas del sector".
40% DE LAS EMPRESAS SON DE CAPITAL EXTRANJERO.
En cuanto a la estructura de la oferta, el 60% de las empresas del sector son de capital español, mientras que el 40% cuentan con una participación mayoritaria de accionistas extranjeros. Las cinco primeras empresas alcanzaron en 2009 una cuota de mercado conjunta del 32% en el volumen de negocio, en tanto que las diez primeras reunieron el 46%.
Asimismo, el estudio indica que, en los últimos años, se ha producido la creación de nuevas empresas especializadas y la entrada en el sector de grupos extranjeros y de empresas de telemarketing y bufetes de abogados, que han diversificado su actividad hacia esta área, aprovechando su infraestructura.
