BARCELONA, 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
La dirección de Henkel Ibérica anunció hoy el cierre de su planta de Abrera (Barcelona), dedicada a la fabricación de adhesivos y en la que trabajan unos 50 empleados, para trasladar esta producción a la planta que el grupo tiene en Montornès del Vallès (Barcelona), informó en un comunicado.
El centro de I+D también se trasladará, mientras que la línea de fabricación de siliconas se llevará a otras plantas del grupo en Europa, informaron a Europa Press fuentes de la compañía.
La decisión, que se enmarca dentro del programa de competitividad de la multinacional, se produce después de que en mayo el grupo alemán anunciara el cierre de su planta de Malgrat de Mar, en la que trabajan 130 personas, y el traslado de la producción de detergentes líquidos centro de Montornès.
Con esta operación, la producción del grupo alemán en Catalunya quedará concentrada principalmente en esta localidad barcelonesa --sólo queda un centro en Sant Adrià de Besòs dedicado a la fabricación de lejías--, lo que favorecerá "la creación de sinergias y mejorará la eficiencia", según fuentes de la empresa.
Para la plantilla de Abrera, Henkel abrirá un proceso similar al que se propuso a los 130 trabajadores de Malgrat de Mar, en el que la plantilla podrá optar por apuntarse a una lista para trasladarse a Montornès (a 50 kilómetros de distancia) y, posteriormente, la multinacional estudiará cuántos empleados puede absorber Montornès.
INVERSIÓN DE 16 MILLONES
Para poder acoger la nueva producción y los trabajadores procedentes del centro de Malgrat de Mar, la compañía lleva invertidos unos 16 millones de euros en la adaptación de instalaciones y líneas productivas en Montornès, donde trabajan actualmente 450 personas. A esta cifra deberá sumarse ahora el coste del nuevo traslado desde Abrera anunciado hoy, informaron las mismas fuentes.
Henkel calcula que el proceso de unificación de las producciones en las instalaciones de Montornès culminará en el tercer trimestre de 2009. Así, en junio del próximo año terminará el traslado de la planta de Malgrat y en los tres meses siguientes la de Abrera.
