PARÍS, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El grupo cementero galo Lafarge concluyó 2009 con un beneficio neto de 736 millones de euros, lo que representa un retroceso del 54% respecto al año anterior, mientras que el beneficio operativo corriente, que excluye elementos excepcionales, bajó un 30%, hasta 2.477 millones, informó la empresa.
La cifra de negocio de la cementera francesa alcanzó los 15.884 millones de euros, un 17% menos, mientras que la compañía logró reducir un 18% su endeudamiento neto, hasta 13.795 millones de euros.
En el cuarto trimestre, Lafarge registró pérdidas de 38 millones de euros, frente al beneficio neto de 40 millones del mismo periodo de 2008, mientras que sus ventas disminuyeron un 22%, hasta 3.641 millones de euros.
No obstante, el grupo cementero se muestra optimista de cara a la evolución del sector en 2010, para cuando espera un aumento de hasta el 5% en los vólumenes de cemento, mientras que los precios se mantendrán "sólidos" en la mayor parte de los mercados en los que opera. En concreto, Lafarge destacó que los mercados emergentes continuarán mostrando fortaleza y serán los principales responsables del crecimiento de la demanda de cemento , mientras que para las economías desarrolladas, la empresa prevé que ésta comience a recuperarse en la segunda mitad del año.
"Hemos logrado una sólida generación de efectivo y significativos ahorros de costes que redujeron el endeudamiento y y sostuvieron los márgenes operativos. Estos esfuerzos continuarán en 2010 mediante un estricto control de la liquidez y un objetivo adicional de ahorro estructural de 200 millones de euros", dijo el presidente y consejero delegado de la compañía, Bruno Lafont.
En este sentido, el máximo ejecutivo de Lafarge destacó que ante la expectativa de crecimiento de la demanda de cemento, especialmente en los mercados emergentes, la compañía ha puesto en marcha planes para incrementar su capacidad y aprovechar asíel crecimiento de estos mercados.
