MADRID, 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
Martinsa-Fadesa no descarta acometer un nuevo recorte de personal en el marco del plan de viabilidad que prepara la inmobiliaria y que prevé presentar a lo largo del próximo mes de octubre.
La eventual nueva reducción de plantilla de la empresa, actualmente en concurso de acreedores, sería consecuencia del ajuste de costes que incluirá el plan y de la reestructuración que se realizará en la empresa para adaptarla a la nueva situación y necesidades, según indicaron a Europa Press en fuentes del sector.
El nuevo recorte de personal, cuya dimensión aún no se ha calculado, tendría lugar después de que en lo que va de año la inmobiliaria controlada y presidida por Fernando Martín haya eliminado más de la tercera parte (el 35,6%) de su plantilla, desde los 880 trabajadores con que contaba a comienzos de año a los 566 actuales.
En un primer lugar, el grupo elaboró y acordó con los sindicatos de su comité de empresa un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectó a 234 trabajadores.
Posteriormente, en la jornada de hoy Martinsa-Fadesa ha autorizado a un total de 80 empleados más abandonar la compañía, informaron a Europa Press en fuentes sindicales y de la empresa.
APROBACIÓN DE 80 BAJAS.
La inmobiliaria dio así 'luz verde' a la mayor parte de las 84 solicitudes que recibió de otros tantos trabajadores de dejar voluntariamente la empresa sumándose al ERE.
Del total de bajas aceptadas, 66 trabajadores dejarán la compañía en cuanto el juez concursal lo autorice, mientras que los catorce restantes (trece empleados de contabilidad y uno de construcción) lo harán a partir del 31 de diciembre.
En cuanto a las cuatro solicitudes de baja voluntaria rechazadas por la empresa, la dirección argumentó que se trata de trabajadores "estratégicos" para el desarrollo de la actividad de la empresa y el proceso de concurso que atraviesa, según explicaron las mismas fuentes.
Los empleados que se sumen al ERE contarán con las mismas condiciones que los 234 que la empresa incluyó en el mismo, ya acordadas el pasado mes de julio entre empresa y sindicatos.
En concreto, el expediente contempla una indemnización de 36 días por año trabajado, con un tope máximo de 20 mensualidades. De la indemnización total, el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) se encargará de abonar veinte días por año y la empresa los otros 16.
