DARMSTADT (ALEMANIA), 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Junta Directiva de Merck ha presentado este jueves al Consejo de Supervisión y a los principales órganos de representación de los empleados los planes iniciales de un "programa de eficiencia" que abarca todos los negocios y regiones y que prevé reducciones de plantilla, con el que la compañía pretende hacer frente a la actual "situación de cambios sin precedentes en el mercado".
Según explica la compañía, estas medidas se enmarcan en el programa integral de transformación que el Grupo anunció el año pasado y que se estructura en dos fases: los dos primeros años establecerá una nueva estructura organizativa, aplicará medidas para mejorar la eficiencia y desarrollará una estrategia de crecimiento a largo plazo para, posteriormnete, "aprovechar las nuevas oportunidades de crecimiento futuro".
El presidente de la junta directiva de Merck, Karl-Ludwig Kley, ha destacado la larga trayectoria de la compañía, pero ha precisado que "en los dos próximos años debe dar respuesta a cambios sin precedentes en el mercado, sumados a una competencia cada vez más intensa en productos clave y a deficiencias existentes en su propia organización; todo ello con el fin de garantizar el éxito a largo plazo de su modelo de negocio".
Así, las nuevas medidas pretende reducir los gastos ordinarios y liberar recursos "que podrán invertirse en áreas con muy buenas perspectivas de crecimiento", ha señalado.
No obstante, no ha ocultado que "el análisis preliminar realizado indica que los objetivos generales del programa de transformación y las medidas dirigidas a su consecución pueden conllevar reducciones de plantilla en todas las áreas de negocio y zonas geográficas", sin adelantar más detalles. Por ello, ha asegurado que se buscarán "soluciones aceptables en términos sociales siempre que sea posible".
"Tenemos un criterio formado sobre lo que el Grupo necesita --ha afirmado Kley sobre esta cuestión--, pero consultaremos con los representantes de los empleados en cada país y estudiaremos todas las propuestas que sean razonables".
A partir de principios de 2012, Merck ha comenzado a implantar una nueva estructura directiva, que determina las relaciones entre las distintas unidades funcionales, áreas de negocio y entidades del Grupo presentes en los distintos países. Con ello se persigue racionalizar esta estructura de forma que sea más sencilla, ágil y que permita acelerar además los procesos de toma de decisiones. Esta reordenación se desarrollará en paralelo al programa de eficiencia .
En la segunda fase de dicho programa de transformación, Merck abordará áreas de crecimiento futuro, basándose en las tendencias que prevalecen actualmente en el sector y en la economía en general. Los primeros pasos en la exploración de estas oportunidades de crecimiento ya se han dado, señala la compañía, que asegura que continuará impulsando su estrategia de desarrollo a largo plazo durante los próximos dos años.
