MADRID, 29 May. (REUTERS/EP) -
Las dos principales aerolíneas de Oceanía, Qantas y Air New Zealand, han decidido hacer frente a los elevados precios del combustible adoptando medidas de racionalización de costes centradas en el cambio de aviones con mayor eficiencia en los consumos y en el alza en sus tarifas.
Air New Zealand, por su parte, anticipó una fuerte caída en sus beneficios anuales e indicó que se decantará por aviones con mayor rendimiento de combustible en algunas rutas clave de largos recorridos, mientras continúa revisando tarifas, rutas y costos.
La aerolínea señaló que prevé que sus ganancias para todo el año sean al menos un 25% menores que las del año pasado, lo que supone su segundo recorte de previsiones en un mes.
"Desde febrero el precio del crudo ha seguido creciendo a 130 dólares por barril y el margen de refinación se ha ampliado a más de 40 dólares el barril", explicaron fuentes de la aerolínea.
La medida adoptada por Air New Zealand pasa por reemplazar sus aviones Boeing 747 del servicio a Londres, a través de Los Angeles, por otros Boeing 777 que ofrecen un mayor rendimiento de combustible.
Asimismo, la compañía elevó las tarifas para sus trayectos domésticos e internacionales cortos cerca de un 3%. Además, advirtió que las tarifas de los recorridos internacionales podrían volver a aumentar.
Por su parte, Qantas efectuó la semana pasada un alza en sus tarifas por segunda vez en menos de un mes. La medida no impidió que la agencia calificadora Standard & Poor's dijera el miércoles que podría bajar las notas de la aerolínea al asignarles un panorama negativo.
Según Geoff Dixon, presidente ejecutivo de Qantas, la estrategia pasa por "fijarse mejor en las áreas en las que tenemos el control". Dixon anunció que las nuevas medidas para reducir costos incluyen la cancelación del 5% de su capacidad de vuelo. El ejecutivo especificó que equivale a sacar de circulación seis aviones.
"Pese a la estrategia de cobertura del precio, los recargos del combustible, los dos aumentos tarifarios globales por separado y un congelamiento de las contrataciones, la compañía no está salvando las diferencias entre el costo del combustible y la cantidad que compensamos", aclaró Dixon.
Los precios del crudo han aumentado un 40% este año a máximos históricos de unos 135 dólares por barril, derribando en picado las utilidades de las aerolíneas y los precios de sus acciones. Los títulos de Qantas bajaron un 36% este año y los de Air New Zealand cayeron un 41%.
Por otro lado, la principal aerolínea de Corea del Sur, Korean Air Lines aseguró que retiraría algunos vuelos entre junio y mediados de julio para sobrellevar los elevados precios del combustible para aviones.
