SAS anuncia el despido de mil empleados
COPENHAGUE, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
Spanair registró una pérdida después de impuestos de 382 millones de coronas suecas (40,8 millones de euros) en el primer trimestre del año, según los datos publicados hoy por su propietaria Scandinavian Airlines (SAS).
Esta cifra hace que la aerolínea mantenga invariable la pérdida registrada en el mismo trimestre del año pasado, cuando contabilizó un saldo negativo de 379 millones de coronas suecas (40,4 millones de euros).
SAS contabiliza los resultados de Spanair dentro de sus operaciones discontinuas, debido a la decisión de desprenderse del 100% de la aerolínea, tras haber comprado el 5% que estaba en manos del grupo Marsans.
La aerolínea escandinava no ha facilitado ningún dato concreto sobre el proceso de venta de la aerolínea, que según sus propias previsiones debería concluir en el mes de mayo, ni tampoco ha aportado más datos sobre los resultados económicos de la misma.
SAS DISPARA SUS PÉRDIDAS.
Por su parte, SAS disparó su pérdida en el primer trimestre del año al contabilizar una pérdida neta de 1.134 millones de coronas (121 millones de euros), frente a la pérdida de 47 millones de coronas (5,1 millones de euros) del mismo periodo de 2007, lo que supone multiplicar por 24 los 'números rojos' de los tres primeros meses del ejercicio anterior.
La aerolínea elevó un 2,6% el número de pasajeros transportados hasta los 7,2 millones entre enero y marzo de este año y la capacidad de sus aviones se mantuvo estable durante el primer trimestre en el 67,8%, 0,2 puntos porcentuales menos que en el mismo periodo del ejercicio precedente.
El beneficio antes de impuestos se situó en el primer trimestre en 973 millones de coronas suecas (103 millones de euros), frente a los 96 millones de coronas (10,2 millones de euros) de entre enero y marzo de 2007.
El presidente y consejero delegado del grupo escandinavo, Mats Jansson, reconoció que para volver a los beneficios y controlar la situación cambiante en el mercado, la aerolínea está tomando una serie de medidas a corto plazo. Entre ellas, destaca el ajuste de precios, cambios en sus programas de tráfico y compromisos de eficiencia adicional de los gastos generales, así como posponer o cesar ciertas actividades ya planeadas.
En este contexto, anunció el despido de aproximadamente mil trabajadores en el marco de su estrategia de control de costes y de ahorro para hacer de la aerolínea una compañía "más fuerte y más competitiva".
