LONDRES, 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
TUI Travel registró una pérdida neta de 266,5 millones de libras (319 millones de euros) al cierre de su ejercicio fiscal, que finalizó el pasado 30 de septiembre, frente a beneficios del 6,9 millones de libras (8,2 millones de euros) registrados en el año precedente, según los datos publicados hoy por la compañía.
La compañía atribuyó estas pérdidas a cargas extraordinarias por valor de 65,3 millones de libras (78 millones de euros) consecuencia de una reestructuración antes de fusionarse con el touroperador británico First Choice.
TUI Travel también cita costes de 164,3 millones de libras (196,3 millones de euros) atribuibles a los planes de integración de ambas compañías y cargas por valor de 151,1 millones de libras (180,6 millones de euros) adicionales vinculados a sus acuerdos de 'leasing' de aviones.
La compañía alcanzó una cifra de negocio anual de 13.932 millones de libras (16.678.22 millones de euros), lo que representa un incremento del 9% respecto del año anterior. En consecuencia con este aumento de los ingresos, el grupo aumentó su margen operativo subyacente un 2,9%.
"Estamos encantados de que en nuestro primer año como empresa fusionada hayamos logrado una mejora de la rentabilidad significativa", destacó el director general de TUI Travel, Peter Long, quién confío en alcanzar unas sinergias de 175 millones de libras (209,2 millones de euros) hasta 2010, frente a los 150 millones de libras (188 millones de euros) anteriormente previstos.
La compañía señaló que prevé una ralentización de la demanda de cara a la próxima temporada de verano, especialmente en el Reino Unido, por lo que reducirá un 16% su capacidad para garantizar sus ventas y alcanzar así sus objetivos de ocupación. Así, destacó que hasta la fecha el volumen de reservas es un 17% más bajo pese a que el promedio de ingresos se mantiene y se prevé que aumente un 10%.
Finalmente, desde TUI Travel se prevé que la caída reciente del precio del combustible repercuta positivamente en los resultados del grupo en los mercados europeos, aunque cita que estos ingresos podrían verse parcialmente compensados por la fortaleza del dólar. Así, estiman que dicha ventaja se materialice en el ejercicio fiscal que finalizará en septiembre de 2010.
