BRUSELAS, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
La compañía farmacéutica belga Union Chémique Bélge (UCB) registró en 2008 un beneficio neto de 42 millones de euros, lo que supone una reducción del 74% respecto a los 160 que ganó el año anterior.
Esta caída del beneficio se produjo, principalmente, por la expiración de la patente de explotación de Zyrtec que la firma tenía en Estados Unidos hasta diciembre de 2007. Por ello, el presidente de UCB, Roch Doliveux, se felicitó por haber logrado "absorber las pérdidas previstas", gracias a una cifra de negocio "estable".
En este aspecto, los datos de 2008 fueron similares a los del año anterior, con unas ventas totales de 3.601 millones de euros, un 1% menos que en 2007. En este apartado destacó el volumen de negocio logrado por el medicamento Keppra, lanzado recientemente al mercado por UCB para tratar la epilepsia, que aumentó sus ventas un 23%, hasta los 1.266 millones de euros.
Respecto al ejercicio financiero 2009, la firma prevé llegar a facturar 3.300 millones de euros, teniendo en cuenta la expiración de la patente de Keppra. Además, espera que su beneficio neto se acerque más a las cifras de hace un año y se sitúe en torno a los 130 millones de euros.
Además, UCB pretende implantar definitivamente este año el programa de reestructuración SHAPE, por medio del cual se centrará más en las enfermedades graves del sistema nervioso y en inmunología, especializándose en "biofarmacia".
Este plan, que incluyó la baja de más de 2.000 empleados --el 17% de la plantilla del grupo--, también tendrá el objetivo de simplificar su estructura corporativa para "mejorar la competitividad y rentabilidad".
