MADRID, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El consejo de administración de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) tiene previsto aprobar en su reunión del próximo martes el informe en el que, como establece el nuevo mecanismo, propondrá al Ministerio de Industria una posible revisión de la tarifa de la luz a partir del 1 de julio, indicaron fuentes del regulador a Europa Press.
Hasta el momento, Industria remitía una propuesta trimestral de revisión del precio de la luz a la CNE, que se encargaba de elaborar un informe no vinculante después de haber recogido las opiniones del sector, agrupado en torno al consejo consultivo de la electricidad.
No obstante, a partir de la revisión del 1 de julio será el propio regulador energético el organismo encargado de elaborar la propuesta tarifaria, que se enviará a Industria para que tome la decisión final.
Fuentes del sector indicaron a Europa Press que es probable que la CNE se decante por proponer una subida significativa en el precio de la luz. Los técnicos del regulador ya advirtieron a finales del año pasado a Industria de la conviencia de aplicar una medida de este tipo.
La primera propuesta del organismo presidido por María Teresa Costa coincide con la creciente presión para que se apliquen subidas que acerquen el precio de la luz al mercado y que ayuden a aliviar el fuerte déficit tarifario --diferencia entre el coste reconocido de la electricidad y los ingresos de la actividad regulada--.
Para este año, la propia CNE calcula que el déficit tarifario podría rondar los 4.725 millones de euros. De esta cifra deben descontarse los derechos de emisión de CO2 asignados a las eléctricas.
Después de aplicar en enero una subida del 3,3%, Industria decidió congelar las tarifas en la última revisión, realizada en abril, en un momento marcado por las elecciones generales y la constitución de un nuevo Gobierno.
El Ejecutivo se había comprometido durante la pasada legislatura a aplicar subidas de la tarifa por debajo de la inflación. Tras las elecciones, el Ministerio de Industria, ahora dirigido por Miguel Sebastián, deberá abordar el problema del déficit y decidir si mantendrá la tarifa en línea con la inflación o aplicar lo que las asociaciones de consumidores ya llaman el "tarifazo".
Durante 2007, cuando el IPC se situó en el 4,2%, la tarifa para los hogares --tarifa 2.0.x, que afecta a unos 20 millones de usuarios-- subió un 2,98%, mientras que en 2006 lo hizo un 5,28%. En 2005 el incremento fue del 1,74%, frente al 1,48% de 2004 y el 1,5% de 2003. Sólo en 2006 el incremento de la tarifa superó al del IPC.
En cuanto a los consumidores industriales, el precio por la electricidad creció más deprisa que la inflación en los últimos años. Las subidas para este colectivo en el conjunto de 2007 fueron del 7,37%, frente al 10,89% de 2006, el 1,73% de 2005, el 1,68% de 2004 y el 2,09% de 2003.
