Economía/Energía.- La planta de gas en Vinaròs (Castellón) estará terminada a finales de 2010

Actualizado: miércoles, 17 octubre 2007 19:43

VINARÒS (CASTELLÓN), 17 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los máximos directivos de la empresa Escal UGS, promotora del proyecto Castor, que contempla una planta compresora de gas en el municipio de Vinaròs (Castellón), explicaron hoy en rueda de prensa que el emplazamiento de la planta terrestre se podría concretar en unas semanas, mientras que ésta estará acabada a finales de 2010.

Tanto el presidente de la empresa, Recaredo del Potro, como el director general de proyectos de Escal, Luis Carmona, insistieron en que ni el depósito submarino a emplazar a 22 kilómetros de la costa de Vinaròs, en la antigua plataforma petrolífera Amposta y a 1.750 metros de profundidad, ni la planta terrestre "suponen ningún tipo de peligro ni daño ni para los habitantes de esta comarca ni siquiera para la flora y fauna del litoral marítimo".

Para refrendar estas afirmaciones pusieron como ejemplo otras plantas y depósitos subterráneos situados en Europa, como uno en Holanda cuyo gas se almacena en tierra, justo debajo de una población.

Los responsables de Escal UGS calificaron el proyecto de "estratégico y urgente" para el sistema gasístico español, dado que la situación actual es "absolutamente delicada", y señalaron que "hace diez años la capacidad de almacenaje ya era insuficiente, y en este tiempo el consumo de gas ha aumentado un 400 por ciento".

Además, hicieron mención en varias ocasiones a las necesidades de gas que tiene Castellón, "con una demanda cada vez mayor a causa del importante consumo de las empresas azulejera, pues el sector industrial castellonense aglutina el 71 por ciento de la demanda de gas".

En un año podrían iniciarse las obras en el mar, según Del Potro, quien añadió que quieren finalizar todos los trabajos para finales del 2010. "Queremos terminar el último trimestre de 2010, para ello tendríamos que empezar los sondeos en otoño del 2008, y, si es así, podemos acabar la obra a finales de 2010", indicó.

La nueva ubicación de la planta terrestre, después de rechazarse por el Minsiterio de Industria la que quedaba a sólo kilómetro y medio del casco urbano de Alcanar, podría estar decidida en cuestión de varias semanas, como avanzó Del Potro, quien matizó que "dar fechas es arriesgarse mucho".

De todas formas, aseguró que será dentro de la zona ya sugerida por el Ayuntamiento de Vinaròs, es decir a unos cinco kilómetros de la costa y que está cercana a la conducción del gas que pasa por Ulldecona y equidistante a los núcleos urbanos más próximos. "Estamos haciendo los estudios de detalle en la zona y en breve esperamos tener la localización precisa, la ubicación se está consensuando con los municipios implicados", aseveró. Los ayuntamientos de Sant Jordi, Vinaròs, Ulldecona y la Diputación han dado su acuerdo a la zona propuesta, "pero falta delimitar el área que ocupará la planta", dijo.

Carmona también explicó que al ser un proyecto que será declarado de Utilidad Pública, no hay especulación a la hora de adquisición de los terrenos por parte de ninguna de las partes. La planta terrestre ocupará 10 hectáreas y contará con chimeneas de ventilación de unos 20 metros de altura, es decir, mucho más bajas que lo indicado en principio.

Las emisiones que haya al aire de los compresores de la planta serán de CO2 en cantidades muy pequeñas, "lo mismo que sale de un hornillo de una cocina casera o lo que producen los camiones y turismos", dijo. Estas emisiones serán de un tres por ciento de lo que produce una central de ciclo combinado.

SECTOR PESQUERO

Los dirigentes de Escal UGS reconocieron que "el sector pesquero puede resultar uno de los más afectados y por eso, se están negociando con las cofradías de pescadores las compensaciones económicas que van a recibir". Aseguraron que las relaciones con el sector pesquero son "magníficas", por lo que no dudaron en que van a llegar a un acuerdo.

Además matizaron que estas compensaciones no corren a cargo de Escal, sino del propio Estado. Durante el periodo de obras, año y medio, las barcas tendrán más limitada la zona de pesca que cuando la explotación ya esté en marcha.

Del Potro recordó que "el sector de la pesca se vio afectado cuando estaba la plataforma de petróleo, se vio afectado cuando hicimos el sondeo y cuando hicimos la prospección sísmica, se habló con las cofradías de pescadores y se les compensó económicamente". También aclaró que la zanja que se abrirá en el mar para el gasoducto "no producirá daños irreparables en el lecho marino, ya que se regenera en el plazo de varios años" .

En cuanto a los beneficios que tendrá Vinaròs por acoger la instalación, los representantes de la empresa se refirieron a un centenar de puestos de trabajo directos, su mayor parte mano de obra cualificada, más otro centenar indirectos a 50 años vista y, sobre todo, ingresos en forma de impuestos y tasas. Además, durante dos meses al año habrá una plantilla adicional para el mantenimiento de todas las instalaciones, tanto las terrestres como las marinas.

Durante la etapa de construcción, un periodo de dos a tres años, se empleará en personal directo unas 400 personas. Además, el puerto de Vinaròs se vislumbra como puerto base para los trabajos que se realicen en la parte marina y el posterior mantenimiento una vez construida la plataforma y el almacén esté en servicio.

La inversión total prevista que comprende la planta de gas es de 925 millones de euros, de los que 30 ya se han destinado a los sondeos realizados en la plataforma petrolífera que se llevaron a cabo frente a las costas de Vinaròs entre 2004 y 2005, según explicaron también Del Potro y Carmona.