PARÍS, 31 Jul. (Del corresponsal de EUROPA PRESS, Salvador Martínez) -
El primer ministro francés, François Fillon, anunció esta tarde las "grandes líneas" del presupuesto del Estado para el próximo ejercicio, en el que, según declaró, habrá 22.700 empleados del Estado menos, pues ése es el número de funcionarios que, jubilándose, no serán remplazados por nuevos asalariados a cuenta de la Administración francesa.
La medida forma parte de la particular lucha del Gobierno francés contra la deuda pública gala, que supera el 60% del PIB. 22.700 es una cifra que dobla la ausencia de reemplazos que se prevé quede registrada a finales de 2007 en un total de 11.700.
Según el programa presidencial del jefe de Estado galo, Nicolas Sarkozy, el Estado preveía no sustituir a un total de 40.000 funcionarios jubilados en 2008. Sin embargo, el anuncio realizado hoy por el jefe de Gobierno francés queda lejos de la previsión electoral del presidente francés aunque, según preciso el ministro del Presupuesto y de la Función Pública, Eric Woerth, supondrá un ahorro para la administración francesa que oscila entre los 700 y los 800 millones de euros.
Fillon defendió hoy la decisión tomada por el gabinete gubernamental que dirige asegurando que el proyecto de presupuestario que maneja es "sólido" al estar basado en "hipótesis creíbles: un crecimiento económico de 2,5%, una inflación del 1,6% y el compromiso del Estado de no aumentar el volumen del gasto".
Por su parte, los sindicatos constataron hoy que "la cifra es menor" a la prevista en el programa del que fuera aspirante a la Presidencia de República del partido conservador Unión por un Movimiento Popular (UMP), pero aún así, señalaron, desde la Unión general de federaciones de funcionarios, el primer sindicato de la función pública, que la cifra de 22.700 es "demasiado grande" y, por ello "resulta inaceptable", según dijo a la prensa el secretario general de esa organización sindical, Jean-Marc Canon.
