Economía/Motor.- BMW centrará su estrategia en aumentar su liquidez y en mantener su independencia

Actualizado: miércoles, 18 marzo 2009 12:44

MUNICH (ALEMANIA), 18 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente del grupo automovilístico alemán BMW, Norbert Reithofer, señaló hoy, durante la presentación de los resultados anuales de la compañía, que la estrategia de la empresa se centrará en aumentar su liquidez y su 'cash flow' y en mantener su independencia.

El máximo responsable de la corporación con sede en Munich resaltó que 2009 será un "año de transición" en el que no están trabajando con previsiones, aunque insistió en que las prioridades de la compañía se centran en conservar la independencia del grupo y aumentar su liquidez.

A pesar de las dificultades a las que se enfrentó la empresa en 2008 y las que afrontará en 2009, Reithofer señaló que los objetivos de rentabilidad a largo plazo de la corporación para 2012 "se mantienen intactos". "Queremos preservar la independencia del Grupo BMW", añadió.

Los objetivos de la compañía para 2012 contemplan lograr un retorno del capital empleado del 26%, así como un retorno sobre las ventas de entre el 8% y el 10% sobre el beneficio bruto en su división de Automóviles.

Sin embargo, el presidente de la multinacional alemana resaltó que BMW estima que las matriculaciones de automóviles en todo el mundo se reducirán durante 2009 entre un 10% y un 20%, aunque manifestó su confianza en que se produzca una recuperación económica internacional en 2010.

Asimismo, el responsable de BMW explicó que su empresa lleva tiempo poniendo en marcha medidas para hacer frente a la fuerte caída de las ventas en todo el mundo y señaló que su renovada gama de producto le ayudará a superar esta situación. Igualmente, Reithofer señaló que ante la actual crisis internacional BMW da prioridad a la liquidez, al flujo de caja y a su capital circulante, así como a la reducción de sus costes fijos y de sus gastos de capital.

RESULTADOS DE 2008.

El grupo automovilístico alemán, que engloba las marcas BMW, Mini y Rolls-Royce, cerró el pasado año con un beneficio neto de 330 millones de euros, lo que supone un desplome del 89,5% respecto a las ganancias de 3.134 millones de euros contabilizadas en 2007.

Este hundimiento de las ganancias es consecuencia de las fuertes provisiones para riesgos que tuvo que dotar la corporación, y que ascendieron a 1.968 millones de euros, a los que se suman 455 millones de euros de costes de reestructuración, en el marco de un programa de bajas que supuso reducir la plantilla en un 7%, hasta 100.000 empleados.

La cifra de negocio de la multinacional se situó en 53.197 millones de euros, lo que representa una disminución del 5% en comparación con el ejercicio precedente, en tanto que el resultado operativo cayó un 78,1%, hasta 921 millones de euros, con lo que el margen operacional (resultado operativo sobre facturación) se contrajo hasta el 1,7%.

El consorcio germano vendió en todo el mundo el pasado año 1,43 millones de vehículos, cifra inferior en un 4,3% a la contabilizada en el ejercicio precedente, con un retroceso del 5,8% para la marca BMW, un aumento del 4,3% para las entregas mundiales de Mini y un incremento del 20% para la firma de lujo Rolls-Royce.