FRANKFURT (ALEMANIA), 15 Dic. (Reuters/EP) -
Uno de cada diez fabricantes europeos de componentes para automóviles podrían declararse en suspensión de pagos en los próximos meses si los gobiernos del Viejo Continente no les conceden ayudas por importe de 25.000 millones de euros para asegurar su supervivencia.
Así lo aseguró hoy el presidente de la Asociación Europea de Proveedores de Automoción (Clepa), Lars Holmqvist, quien señaló que alrededor de 500 fabricantes de componentes para vehículos afrontan serios riesgos de quiebra, a menos que acudan en su ayuda la Unión Europea o los gobiernos correspondientes.
"Es importante que la Comisión Europea mire a la industria, haga el cálculo, y probablemente saldrían más de 25.000 millones de euros", señaló Holmqvist, quien pidió garantías de que los bancos vuelven a facilitar financiación, "porque de momento no lo están haciendo", afirmó.
Europa cuenta con una base de fabricantes de componentes para automóviles formada por 5.000 empresas. Clepa defiende los intereses de 3.000 de estas compañías, que emplean a tres millones de trabajadores y que facturan anualmente 300.000 millones de euros.
Holmqvist puso como ejemplo al fabricante alemán de neumáticos y componentes Continental, una empresa que estaba haciendo negocios sólidos y que se ve amenazada por la crisis del crédito. La pasada semana Continental anunció que ha pedido más tiempo a los bancos para pagar deudas por importe de 11.000 millones de euros.
El presidente de Clepa advirtió de que el impacto real de la crisis sobre los proveedores está por llegar, ya que los pagos de sus clientes no son al contado. "El 'cash flow' no se ha visto afectado, pero lo hará entre febrero y marzo", alertó.
