VALLADOLID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los delegados sindicales de CC.OO. y CGT en Renault-España, Joaquín Arias y Miriam Largo, respectivamente, coincidieron al expresar su escepticismo ante los nuevos anuncios sobre los planes de la compañía francesa de la marca del rombo para sus plantas españolas.
De este modo analizaron los delegados de CC.OO. y CGT la decisión del Gobierno de la nación y del grupo automovilístico francés de constituir un grupo de trabajo, en el que participará la Junta de Castilla y León, para impulsar el desarrollo del coche eléctrico en España. Además, la multinacional francesa mantuvo hoy su compromiso de aumentar un 15% su producción en España en 2009 y descartó que el mantenimiento de la fábrica gala de Sandouville tenga consecuencias negativas para las plantas españolas.
A pesar de no tener toda la información sobre la reunión, el delegado de CC.OO. en Renault, Joaquín Arias, indicó que no es lo que esperaban ya que aumentar un 15% la producción en España no es un compromiso, sino algo que ocurrirá en la factoría de Palencia con la fabricación del nuevo Mégane, ya que se aumentará el número de vehículos fabricados de 850 a 1.100 al día.
Además, indicó que la defensa de la carga de trabajo se centra en Valladolid porque Palencia la tiene asegurada, por lo que mostró su decepción ante lo que ha trascendido de la reunión entre el ministro de Industria, Miguel Sebastián, y el presidente del grupo automovilístico, Carlos Ghosn.
En cuanto a la creación de un grupo de trabajo sobre un vehículo eléctrico, recordó que Ghosn ya anunció su propósito de adjudicarlo a la factoría francesa de Flins, mientras que la Traffic se fabricaría en Sandouville. Así, la conclusión que saca el responsable sindical es que por el momento no se ha dado ninguna solución, por lo que no vio un avance positivo en la reunión.
Por su parte, la delegada de CGT en la empresa, Miriam Largo, también se mostró escéptica ante una reunión de la que por ahora carece de información, pero indicó que lo importante es lograr "hechos", porque, a su juicio, no se ha producido ninguno y sólo se ha sacrificado a los trabajadores, que están "apáticos".
En este sentido, consideró que Renault lo único que hace es "chantaje" con amenazas de cierre, igual que en 2005, cuando, según recordó, se dieron subvenciones y se cedió por parte de los empleados a cambio de mayor carga de trabajo, algo que no se ha visto, cuestionó.
Por eso, aseguró no creerse nada de lo que por el momento se diga hasta que no se traduzca en hechos porque ahora en Renault-España "de repente" todo va muy mal. Largo aprovechó para criticar los tipos de contrato "precarios" que se están llevando a cabo en las factorías como la de Valladolid.
