BRUSELAS, 25 Ene. (EP/AP) -
Los trabajadores de la planta del grupo Volkswagen, primer fabricante de automóviles de Europa, iniciaron hoy una huelga sin previo aviso para exigir a la dirección de la empresa una explicación sobre el futuro de la factoría.
Asimismo, los empleados abandonaron sus puestos de trabajo en protesta por el retraso en las negociaciones sobre las medidas sociales que se aplicarán a los trabajadores que tendrán que dejar la compañía.
Tras una primera serie de paros que se prolongaron durante siete semanas, provocados por la decisión de la empresa de suprimir la producción del Golf, la fábrica de Bruselas volvió a su actividad habitual el pasado 8 de enero.
Volkswagen puntualizó que estudia asignar a la factoría belga la producción de un nuevo modelo de gama baja de la firma Audi, lo que permitiría mantener al menos 3.000 puestos de trabajo en las instalaciones.
La última huelga comenzó anoche cuando los trabajadores abandonaros sus puestos. Los sindicatos precisaron que los paros continuarán hasta que la dirección de la compañía no acepte mantener una reunión.
