MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las ventas de automóviles a particulares en Navarra se elevaron a 723 unidades durante el primer mes de vigencia del Plan Renove con ayudas directas, implantado por el Gobierno foral, lo que supone un aumento del 10,7% en comparación con el mismo período de 2008, según datos de MSI para la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto).
Además, de acuerdo con las cifras de la Asociación Navarra de Talleres de Reparación de Vehículos (ANTRV), se han acogido al programa de ayudas 1.100 operaciones. Esto quiere decir que cerca de 400 operaciones se traducirán en matriculaciones en breve, lo que asegura el crecimiento del mercado en Navarra.
De mantenerse esta progresión, Navarra será la única comunidad autónoma que cerrará abril con un aumento de las ventas de coches. Faconauto estima que las matriculaciones alcanzarán 870 unidades en abril, un 10% más, a pesar del menor número de días hábiles por el efecto estacional de la Semana Santa.
Las cifras de Navarra contrastan con la caída del conjunto del mercado español, que en el mismo período (entre el 23 de marzo y el 23 de abril) acumula un retroceso del 28,6% en el canal de particulares.
Ante estos datos, la patronal de los concesionarios subraya que el ejemplo navarro pone de manifiesto la eficacia de las ayudas directas, que permiten un cambio de tendencia inmediato en el mercado.
"El buen resultado del Plan Renove de Navarra hace inexcusable la puesta en marcha en nuestro país, con carácter inmediato, de ayudas directas a la compra de coches", manifestó el presidente de Faconauto, Antonio Romero-Haupold.
A su juicio, los incentivos directos son una herramienta para que el consumidor recupere la confianza perdida y, además, presentan un balance positivo desde el punto de vista fiscal (mayores ingresos por recaudación de impuestos), medioambiental, de seguridad vial y social.
El Plan Renove de Navarra, que estará vigente hasta el próximo mes de diciembre, establece una ayuda de entre 1.200 y 2.200 euros para la adquisición de vehículos con reducidas emisiones, con un tope de 140 gramos por kilómetro.
