BERLIN, 26 Jul. (EP/AP) -
El fabricante de vehículos alemán Volkswagen ha anunciado que demandará a cualquiera que le relacione con la investigación sobre corrupción que la Fiscalía de Frankfurt está realizando a la marca de componentes para automóviles francés Faurecia, de la que se sospecha que ha estado sobornando a empleados de marcas alemanas de automóviles para la concesión de contratos.
Los fiscales alemanes informaron a principios de esta semana que estaban llevando a cabo una investigación sobre las relaciones entre Faurecia y los empleados de Volkswagen y BMW, a causa de posibles pagos para la adjudicación de contratos.
Por este motivo, el mayor fabricante de automóviles de Europa anunció hoy que interpondrá una demanda contra quien dañe su imagen al relacionarlo con el escándalo en el que se encuentra envuelto Faurecia.
En este sentido, el presidente de la compañía, Bernd Pischetrieder afirmó que en Volkswagen "no va a tolerar intrigas ilegales". Estas declaraciones fueron dirigidas tanto a los empleados de la propia marca como a los socios y proveedores de la misma.
RELACION CON EMPRESAS ALEMANAS.
La Fiscalía de Munich comunicó recientemente que existen sospechas del pago de sobornos por parte de Faurecia a un representante de la marca automovilística alemana BMW, que se unen a las acusaciones ya vertidas sobre otros fabricantes germanos, como Volkswagen.
El portavoz de la fiscalía muniquesa, Anton Winkler, indicó que las investigaciones sobre los sobornos entre Faurecia y BMW dieron comienzo el pasado mes de mayo. Este caso ya salió a la luz en julio del año pasado, cuando un gestor de compras de BMW fue detenido acusado de recibir sobornos.
Sin embargo, no se encontró a la persona que entregó esos sobornos al empleado de BMW. Con motivo de las recientes sospechas de cohecho, un portavoz de la marca de automóviles, Frank Wienstroth, subrayó que en su empresa no se ha producido otro caso similar al del julio del año anterior.
Por su parte, Winkler destacó que el gestor de BMW, que ha estado bajo custodia durante un año, es sospechoso de haber recibido cientos de miles de euros por parte de varios proveedores.
Los investigadores sospechan que Faurecia pudo realizar pagos de entre 600.000 y 800.000 euros anuales a empleados de fabricantes alemanes de automóviles para asegurar la consecución de contratos al menos desde 1998. La investigación afecta por el momento a 20 personas.
