Anuncia que los decretos sobre la CNE y de reforma del sector eléctrico serán ratificados la próxima semana por el Congreso
MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Montilla, afirmó hoy que el Gobierno analizará los extremos sobre los que se ha interesado la Comisión Europea en una carta remitida al Ejecutivo español en relación a la ampliación de competencias de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), y que "tendrá la oporortuna respuesta".
Montilla confirmó que el Gobierno ha recibido la misiva remitida por la Dirección General de Mercado Interior de la UE, que encabeza el comisario Charlie McCreevy, en la que se le pregunta sobre diversos matices del real decreto aprobado el pasado 24 de febrero, como la ampliación de la llamada 'Función 14', que faculta a la CNE para supervisar operaciones corporativas en sectores estratégicos, independientemente de si sus protagonistas son empresas españolas o extranjeras y operan o no en dichos sectores.
El ministro, que intervino en un almuerzo organizado por la APIE, afirmó que el Gobierno español también mantiene contactos telefónicos regulares con la Comisión Europea, y se mostró convencido que estos temas "llevan tiempo".
Montilla aprovechó para anunciar que tanto este decreto que modifica las competencias de la CNE como por el que se reforma el mercado mayorista de electricidad ('pool') para suprimir el déficit de tarifa serán ratificados la próxima semana por el Pleno del Congreso.
Preguntado sobre las declaraciones realizadas la pasada semana por el presidente de E.ON, Wulf Bernotat, en el sentido de que las nuevas atribuciones de la CNE pueden contravenir la legislación comunitaria, Montilla contestó que "es una opinión de este señor, que defiende sus intereses".
En cuanto a la afirmación de Bernotat de que cualquier empresa europea puede comprar la energética germana, Montilla afirmó que "se trata de una opinión del presidente de E.ON que el Gobierno español no comparte.
"No es ésa la opinión que nosotros tenemos. Hay una serie de condiciones, llámesele blindaje o lo que sea, que en la práctica hacen poco vulnerable a la empresa. No permitimos a E.ON que nos diga lo que tenemos que hacer, igual que tampoco le vamos nosotros a decir lo que debe hacer", subrayó Montilla.
Afirmó no haber visto la carta del ministro alemán de Energía, Michael Glos, en la que al parecer aclara a las autoridades españolas que no dispone de derecho de veto alguno sobre E.ON. "El viernes no llegó, y si ha llegado hoy, todavía no he tenido ocasión de verla", explicó Montilla, quien, no obstante, dejó claro que cuando llegue se examinará y comprobarán "los extremos" sobre los que se pronuncia.
Preguntado por qué en este asunto están interviniendo otros miembros del Gobierno, como el jefe de la Oficina Económica de Presidencia del Gobierno, Miguel Sebastián, Montilla contestó que este tema "no es exclusivo" de energía, porque afecta a otras áreas, como competencia, algo que depende de Economía y Hacienda, y que por su trascendencia es seguido por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. "No es por tener protagonismo ni por que nadie quiera ceder competencias", dijo.
"AL PP LE PASARÁ FACTURA".
Afirmó que este asunto está "politizado" porque "así se empeñó el PP con declaraciones absolutamente surrealistas de algunos de sus dirigentes, como que la OPA iba a desembocar que la empresa resultante quedaría fuera del territorio nacional", dijo en alusión al lapsus que cometió la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre.
"Ya les pasará factura, porque estas cosas se pagan. Prefieren que las decisiones sobre la empresa más importante del sector eléctrico español se tome desde una ciudad europea y no desde Madrid o Barcelona. Tan España es una como otra", subrayó Montilla.
El ministro se lamentó de que "algo que tenía que ser una operación entre empresas se ha empañado por aspectos políticos de los que ya no se puede desprender".
LA NUEVA FUNCIÓN 14 "LLENA UN VACÍO" LEGISLATIVO.
El titular de Industria aclaró que el Gobierno ha modificado la Función 14 porque "había un vacío" legislativo que era necesario llenar, e insistió en que el energético es un sector considerado estratégico por el Ejecutivo. "Aquí no se habla de proteger a los que fabrican yogures (dijo en alusión a la defensa que el Gobierno francés hizo de Danone), sino de una empresa que opera en el sector eléctrico y que además está "en el extremo de Europa".
Afirmó que no tiene sentido que la OPA de Gas Natural sobre Endesa, o la que formuló anteriormente la gasista sobre Iberdrola, al igual que la frustrada unión entre Iberdrola y Endesa fueran supervisadas por la CNE, y que la entrada de ACS en Fenosa o la OPA de E.ON sobre Endesa no sean objeto de escrutinio.
Preguntado si esta norma puede servir también para 'blindar' a Repsol YPF, aseguró que esta medida no tiene por objeto la preservación de una empresa determinada, sino de sectores considerados estratégicos, por lo que no tiene un destinatario concreto.
En referencia a la ligera variación que presenta la redacción del real decreto tal y como se publicó en el BOE respecto a la nota de prensa que difundió el Gobierno tras el acuerdo de Consejo de Ministros, afirmó que "lo que se aprueba en Consejo de Ministros es lo que sale publicado en el BOE", y afirmó que "lo sorprendente es que se piense que queremos manipular".
Haciendo un análisis más general del sector en el marco europeo, el ministro afirmó que está siendo "objeto de debate" en Europa después de que recientes acontecimientos, como la crisis del gas entre Rusia y Ucrania, pusieran en "jaque" el agastecimiento de gas.
Afirmó que se trata de un sector regulado y que "no es estrictamente" competencia comunitaria, ya que los estados mantienen amplias competencias en él, pese a la transposición de las directivas del gas y de la electricidad. Así, afirmó que la situación de los distintos países es muy diversa, ya que en algunos hay una situación de monopolio, en otros es un oligopolio y a veces mantienen capital público en su accionariado "con objeto de protegerlas, cuando no de blindarlas".
Montilla señaló que eso pasa en Francia, con EDF; en Portugal, con EDP; en Italia, con Eni y Enel, y también en otros países como Alemania o en Bélgica, siendo Reino Unido "una excepción". Todos ellos cuentan con instrumentos de blindaje de sus empresas que son "desiguales y asimétricos", dijo el ministro.
Al hilo de este argumento, expuso que se trata de un sector con una singularidad que no tienen otros, además de con unos problemas específicos que hacen que los estados tengan especial preocupación por los mismos.
Por ello, avanzó que este tema será objeto de debate en el Consejo extraordinario de Ministros de la UE que se celebrará la próxima semana, y en el Consejo de Ministros previsto para finales de abril.
"EL SECTOR ELÉCTRICO NECESITA RETOQUES, NO UN REVOLCÓN".
Montilla afirmó que el sector eléctrico "necesita retoques, pero no un revolcón", al considerar que aunque las leyes eléctrica y de hidrocarburos "han quedado desfasadas en algunos aspectos, en lo esencial siguen siendo válidas".
En cuanto a los cambios introducidos en el sector con el objetivo de frenar el déficit de tarifa (el que surge cuando los ingresos regulados no compensan los costes de generación), Montilla afirmó que el Gobierno ha actuado al comprobar la existencia de unos precios "artificiales" en el mercado mayorista de electricidad que se han triplicado desde 2004 sin que haya causas que lo justifiquen.
"Esto se debe a una legislación que fija el precio del total en función de un precio margilna por la alta demanda que hemos tenido". explicó el ministro, quien subrayó que el déficit de tarifa no ha sido algo "coyuntural o temporal".
