BILBAO, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
Euskaltel ha denunciado a Orange ante la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) por interrumpir el servicio a 10.000 clientes de la operadora pendientes de ejecutar la portabilidad, pese a haberla solicitado antes del 31 de marzo, lo que calificó de "grave incumplimiento" de la resolución de la Comisión.
En un comunicado, la compañía vasca acusó a Orange de "incumplir" la resolución de la CMT de 18 de enero de 2007, "que obligaba a garantizar el servicio más allá del 31 de marzo a los clientes que hubieran solicitado la portabilidad antes de esa fecha".
Euskaltel dijo haber constatado que, desde el 1 de abril, Orange "ha cortado el servicio de llamadas a cerca de 10.000 clientes que habían solicitado su portabilidad desde el día 27 de marzo y estaban pendientes aún de su ejecución efectiva".
Los mismos medios precisaron que la actuación de Orange se lleva a cabo "en dos sentidos". Por una parte, no sólo "no garantiza" a los clientes residenciales de pospago "la continuidad del servicio en los términos en que fue contratado" sino que "ha decidido pasarles, de manera unilateral y sin consentimiento alguno de los clientes, de la modalidad de pospago a la de prepago, estableciendo la aplicación de una tarifa que ha considerado a su libre albedrío y dejándoles sin servicio durante el proceso".
Para el operador vasco, la actuación de Orange "es más grave aún si cabe", ya que por otro lado, "está impidiendo la realización de llamadas a los clientes de empresa que habían solicitado su portabilidad y que están pendientes aún de ejecutar".
"En este caso, cuando los clientes de empresa intentan realizar una llamada, Orange les conecta con un Call Center en el que comunica a los clientes que para continuar con el servicio activo, deberán facilitarle sus datos", prosiguió.
También manifestó que, en el caso de que los usuarios no estén dispuestos a facilitar a Orange sus datos, "ya que estos están pendientes de la ejecución de su portabilidad", la compañía "les niega la posibilidad de realizar llamadas salientes". "En algunos casos, les ofrece como opción para poder continuar realizando llamadas, pasar el número a la modalidad de prepago con un saldo de 6 euros", agregó.
Euskaltel explicó que cuando los clientes "manifiestan su confusión y explican a Orange que han solicitado ya la portabilidad a Euskaltel", el operador les comunica que el problema corresponde a la compañía que preside José Antonio Ardanza, a la que le instan a remitirse para que se lo resuelva, "con la consiguiente repercusión negativa hacia la imagen de Euskaltel".
Por todo ello, Euskaltel ha denunciado a Orange ante la CMT "por grave incumplimiento" de su resolución. Además, ha requerido a Orange "de forma expresa y urgente" el cese "inmediato" de esta actuación "que va en perjuicio de los clientes".
"Más aún ante el hecho del inicio el próximo miércoles de las vacaciones de Semana Santa, fechas en las que el uso del teléfono móvil se verá incrementado, debiendo Orange cumplir con las condiciones establecidas por la CMT y garantizar el servicio en iguales condiciones a las que se venía prestando, todo ello hasta el momento de la efectiva tramitación de la portabilidad a Euskaltel", añadió.
