BRUSELAS, 14 Jun. (EP/AP) -
Las principales operadoras de móvil, agrupadas en torno a la GSM Association, mostraron hoy su rechazo a que la Comisión Europea apruebe un plan que acabe con los recargos por llamadas en itinerancia ('roaming') y calificaron cualquier iniciativa en este sentido de "camisa de fuerza reguladora".
Según dicen, la intervención de la UE en este asunto podría forzarles a ofrecer servicios por debajo del precio de coste e incluso a renunciar a la prestación de servicios de llamadas de este tipo a todos sus clientes.
"Podrían hacer que se salga perdiendo", afirma la asociación, para la que "no está justificado que se obligue por regulación a ofrecer servicios por debajo del precio de coste".
Por su parte, la Comisión argumenta que las operadoras, pese a las rebajas aplicadas, han hecho oídos sordos a sus repetidas peticiones para que eliminen los "injustificados" altos precios de las llamadas en itinerancia.
Por este motivo, el mes que viene presentará un borrador de ley que podría suprimir los cargos que se le aplican al cliente cuando reciben una llamada en el extranjero. Además, la Comisión podría establecer un sistema de tarifas para el conjunto de la UE.
Las compañías de móvil ingresan alrededor de 10.000 millones de euros en Europa gracias al 'roaming' dentro de Europa, según los datos de la Comisión. Las compañías argumentan que el 'roaming' forma parte de un modelo complejo de precios en el que el alto coste de este servicio les permite ofrecer otros productos más baratos.
