Sugiere "un plan Marshall del siglo XXI" para ayudar a los países más pobres de Europa
BARCELONA, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, ha reclamado este domingo que los partidos de izquierda "tomen el testigo" del activismo que llevan a cabo los sindicatos en la lucha contra los recortes.
En su intervención durante la clausura del X Congreso de CC.OO. de Cataluña, ha asegurado que "el sindicalismo no lo puede todo ni cabe cargarle con esta responsabilidad", y ha lamentado que la izquierda ha estado ausente y sin un discurso alternativo.
Así, se ha referido a la visita a España del expresidente de Brasil e histórico líder sindical Inácio Lula Da Silva: "La izquierda tiene que plantear una propuesta para refundar Europa. Ha tenido que venir Lula a decírnoslo y algunos solo se han enterado cuando lo ha dicho él", ha aseverado.
Toxo ha recordado la última convocatoria de huelga general como una protesta exitosa aunque "sin resultados todavía, porque es una pelea de largo recorrido", y ha dicho que desconoce el efecto que el paro tuvo en el resultado de las elecciones catalanas, porque no se convocó con la voluntad de que influyera.
Sobre la situación política catalana, ha ironizado que ha tenido que venir el ministro de Educación, José Ignacio Wert, con su reforma educativa para "darle aire a Mas, que había recibido un varapalo de la ciudadanía" en las elecciones.
El secretario general ha lamentado que crezca el sentimiento antieuropeo por culpa de los recortes, y ha reclamado "un plan Marshall del siglo XXI" para ayudar a los países en peores condiciones de la UE.
"Alemania estaría hoy en la edad de piedra si no se hubiera puesto en marcha un plan de estas características. ¿Y dónde está Alemania ahora? Solo velando por su propio interés", ha criticado.
Sobre la financiación de los sindicatos, ha sostenido que no se debe renunciar a que se financien públicamente organizaciones políticas y sociales, y ha cargado contra medidas como el anuncio de la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, de dejar a los diputados sin sueldo, lo que ha considerado un intento de limitar el trabajo en la política a las clases pudientes.
