Economía/Turismo.- Más de la mitad de los españoles 'atrapados' en Roma ya han vuelto a España o lo harán hoy

Actualizado: miércoles, 12 noviembre 2008 12:51

El Consulado español dio prioridad a los pasajeros que presentaban problemas especiales, como es el caso de los enfermos y los menores

ROMA, 12 Nov. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Gloria Moreno) -

Más de la mitad de los españoles que se habían quedado 'atrapados' en Roma como consecuencia del cierre del aeropuerto de Ciampino ya han podido regresar o lo harán a lo largo del día de hoy, según informaron a Europa Press fuentes consulares.

La causa del cierre del aeropuerto fue el accidente leve sufrido el lunes por la mañana por un avión de la compañía de bajo coste Ryanair y que terminó con un aterrizaje de emergencia. La aeronave quedó bloqueada en las pistas del aeropuerto y no pudo ser retirada hasta ayer por la tarde.

Tras dos días de paralización, el aeródromo volvió a reanudar sus actividades a partir de las 19.30 horas, lo que agilizó el proceso de recolocación de los centenares de pasajeros de distintas nacionalidades que habían quedado bloqueados.

Los españoles 'atrapados' en Roma a lo largo de los dos días fueron más de 1.000. Sin embargo, poco a poco, la situación se ha ido normalizando y "más de la mitad" ya han conseguido regresar a España o lo harán a lo largo del día de hoy.

Las mismas fuentes del Consulado aseguraron que todos los pasajeros ya tienen vuelo de regreso, aunque algunos de ellos no podrán salir hasta el viernes, como es el caso de los afectados que proceden de Santander.

SANTANDER Y SANTIAGO LOS MÁS "DESAMPARADOS".

De hecho, los pasajeros que se han visto "más desamparados" son los de Santander, ya que Ryanair es una de las pocas, sino la única, compañía que cubre la ruta Roma-Santander.

Algo parecido sucede con los de Santiago de Compostela. Sin embargo, muchos de éstos últimos han decidido tomar un avión de regreso hasta Madrid u otras ciudades españolas y de allí, otro que los conduzca hasta la capital gallega. Este segundo billete lo tendrán que pagar ellos y luego tendrán que reclamar a la compañía Ryanair para que les reembolse el dinero.

Desde el primer día, el Consulado de España en Roma presionó tanto a la compañía irlandesa como a las autoridades aeroportuarias para que atendieran a los pasajeros españoles que no habían podido regresar a sus ciudades.

Gracias a la mediación del director del aeródromo romano, ha sido posible ofrecer hotel y comida a todos los afectados hasta que puedan volver a España. Los gastos correrán a cargo de Ryanair.

Asimismo, el Consulado intentó dar prioridad a los pasajeros que presentaban problemas especiales, como es el caso de los enfermos y los menores, así como de los ancianos.

ASISTENCIA SANITARIA

Entre las personas que necesitaron asistencia sanitaria figuran una mujer que se había sometido hace poco a un transplante y un niño de cuatro años que tenía fiebre. Otra mujer procedente de Bilbao, que tenía cita para ser operada mañana por la mañana, decidió alquilar un coche y volver a España por carretera al no encontrar ningún vuelo directo que la condujera hasta su ciudad.

Uno de los grupos que pudo ser recolocado con más agilidad fue una cincuantena de menores que, junto a sus profesores, tenían que volver ayer a Girona. Finalmente, se consiguió recolocarlos a todos en otros vuelos que salieron ayer mismo del aeropuerto de Fiumicino.

EFECTO DE LA HUELGA

El mismo lunes, muchos de los pasajeros que habían quedado bloqueados en Ciampino se trasladaron rápidamente a Fiumicino, el aeropuerto principal de la capital italiana, en busca de un vuelo que los devolviera a España.

Sin embargo, una vez allí, se toparon con la huelga salvaje de 24 horas que había sido proclamada por algunos empleados de Alitalia y que provocó centenares de retrasos y cancelaciones, hasta el punto de que muchos pasajeros se vieron obligados a pasar la noche en el aeropuerto.

También hoy, el aeropuerto de Fiumicino tuvo que cancelar decenas de vuelos como consecuencia de los desórdenes operativos provocados por la huelga salvaje.