BRUSELAS, 27 May. (EUROPA PRESS) -
La comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo respaldó hoy la intención de la UE de incluir el sector de la aviación en el sistema de intercambio de emisiones de CO2, pero insistió en que los topes a las emisiones sean aplicables para todos los vuelos que partan o lleguen a la Unión a partir de 2011, y no a partir de 2012 como acordaron los ministros de Medio Ambiente el pasado mes de diciembre.
Este sistema de intercambio de emisiones asigna una cantidad determinada de derechos de emisión a cada operador y permite comerciar estos derechos con otros operadores y sectores del régimen comunitario.
La comisión parlamentaria pidió asimismo que los ingresos obtenidos a partir del comercio de emisiones repercutan en la lucha contra el cambio climático y "no se pierdan en presupuestos generales", según explicó tras la votación del texto el ponente del mismo, el eurodiputado del PPE Peter Liese. Precisó que reclama que el dinero recaudado se destine obligatoriamente a la financiación de I+D para la búsqueda de tecnologías más limpias.
En cuanto al gasto que esto supondrá para el pasajero, Liese aseguró que, en base al modelo de cálculo utilizado por su comisión y si el consumidor no asumiera el monte total del incremento, "sería de 6,07 euros para un vuelo entre, por ejemplo, Londres y Mallorca". E insistió en que "la cuestión sería si estos ingresos se utilizarán para desarrollar transportes más limpios".
Otro de los puntos en los que el Parlamento difiere con lo acordado por los Veintisiete se refiere a las condiciones en las regiones europeas ultraperiféricas, como las Islas Canarias. La propuesta del Consejo de ministros de medio ambiente de la UE es que los vuelos entre estas regiones queden excluidos, pero la comisión de Medio Ambiente no está de acuerdo en este punto del que Liese dijo que "nadie me ha explicado qué razón hay para esta derogación".
En este sentido, el ponente del informe señaló que en todo caso el problema para los ciudadanos que viven en estas regiones ultraperiféricas es llegar al continente y no trasladarse entre las islas. De cualquier modo, consideró que los Estados podrían contemplar otras formas de compensar esta situación, pero no la derogación del sistema de emisiones ya que "todos los vuelos intraeuropeos deberían ser incluidos". De no ser así, Liese consideró que sería una dificultad añadida para convencer a países terceros.
Para que la norma se apruebe definitivamente es necesario un acuerdo entre los Veintisiete y la Eurocámara, ya que ambas instituciones son colegisladores en esta materia.
