El Gobierno dará la residencia a extranjeros que compren una casa de más de 160.000 euros

Actualizado: lunes, 19 noviembre 2012 23:34


MADRID, 19 Nov. (OTR/PRESS) -

El Gobierno estudia conceder permiso de residencia en España a extranjeros que adquieran una vivienda cuyo precio sea superior a 160.000 euros, según anunció el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz. Sobre esta medida, el presidente del Gobierno ha asegurado que no se ha tomado aún una decisión al respecto, pero lo que el Ejecutivo quiere es dar salida al stock de viviendas sin vender a precios razonables.

Jaime García-Legaz indicó, en su intervención en 'El Ágora' de 'El Economista', que "en unas semanas se va a poner en marcha una reforma del Decreto de extranjería para conceder permisos de residencia en España a extranjeros que adquieran una vivienda a partir de un nivel de precio".

El secretario de Estado apuntó a los 160.000 euros como el límite de precio de los pisos que se fijaría en esta medida, un importe "equilibrado". "No se puede poner un límite de precio más bajo, porque generaría una demanda masiva de permisos de residencia", añadió.

En cuanto a los destinatarios, Gargía-Legaz ha considerado que los mercados ruso o chino son en los que se detecta "una demanda importante de vivienda en España".

Según indicó, se trata de una iniciativa en la que trabajan desde la pasada primavera los ministerios de Empleo, Fomento, Interior y Asuntos Exteriores, y cuyo objetivo sería reducir el 'stock' de pisos que existe en España, donde actualmente "no se ve mucha capacidad de compra por la falta de crédito".

De hecho, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha hecho referencia a que el Ejecutivo quiere dar salida al stock de viviendas sin vender a precios razonables y "no a los precios desproporcionados de años anteriores". No obstante, Rajoy aseguró sobre esta nueva medida que "no hay tomada ninguna decisión por parte del Gobierno".

En rueda de prensa conjunta con la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, Rajoy recordó asimismo que tras 17 meses seguidos de caídas de las ventas, en agosto y septiembre han mejorado. "Es un dato menor, pero es positivo", reiteró.

Según Rajoy, España necesita vender estas viviendas y que el sector de la construcción salga "adelante" porque da trabajo a mucha gente, tanto por vía directa como indirecta. "Por tanto, es un sector importante para el conjunto de la economía española y espero que se recupere", aseguró.

INMIGRANTES VEN ESTA MEDIDA COMO "UNA BURLA"

Precisamente los datos del Ministerio de Fomento muestran que los extranjeros no residentes en España han reducido sus compras de inmuebles en un 85,5% desde antes de la crisis.

A lo largo del primer semestre de este año sólo se han vendido 1.363 viviendas a extranjeros no residentes en España, muy lejos de las 9.407 que se transaccionaron en el mismo periodo de 2006, antes del pinchazo de la burbuja inmobiliaria.

Y, a pesar de las intenciones del Ejecutivo, asociaciones de inmigrantes ven esta medida como "una burla a miles personas que durante años han trabajado en España y que ahora se tienen que marchar porque no pueden pagar el piso en el que viven".

"Es una tomadura de pelo por parte del Gobierno, pues, con esta iniciativa sólo incluye a colectivos como el chino y el ruso que tienen un poder adquisitivo superior al resto de inmigrantes que ahora se encuentran en España", ha criticado el portavoz de la Federación Estatal de Asociaciones de Inmigrantes y Refugiados en España (FERINE), Gilberto Torres.

Por tanto, Torres ha rechazado "de plano" esta medida, que pone a determinados colectivos de extranjeros en "posiciones ventajosas" respecto al colectivo latinoamericano, que "está regresando a sus países de origen por la situación tan crítica en la que vive, pues muchos de sus miembros se encuentran en procesos de desahucio".

Por su parte, el presidente de la asociación de ecuatorianos Rumiñahui, Vladimir Paspuel, asegura que la mayor parte del colectivo de extranjeros "no tiene ni para sobrevivir" y considera que la nueva fórmula para conseguir un permiso de residencia, vinculada al mercado de trabajo, le ha causado una "enorme sorpresa" porque se quedan fuera "miles de extranjeros".

Si bien "respeta" esta propuesta para "sanear la banca", también advierte de que lo que se necesita son reformas para apoyar a las personas extranjeras "que durante años han contribuido al crecimiento de España y que actualmente se encuentran en una situación de extrema vulnerabilidad".