Gripe aviar.- Bruselas está dispuesta a proceder de urgencia para fijar ayudas que reduzcan la producción de pollo

Actualizado: martes, 21 marzo 2006 20:25

La comisaria de Agricultura insiste en la destrucción de los huevos como método para recuperar los precios


BRUSELAS, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

La comisaria de Agricultura, Mariann Fischer Boel, aseguró hoy ante el Parlamento Europeo que está dispuesta a proceder de urgencia para definir cuanto antes las ayudas a las que podrán acogerse los Estados miembros para reducir la producción de carne de pollo, la forma con la que se espera superar la crisis de confianza en el consumo y la crisis de precios que ha provocado la llegada de la gripe aviar a la UE.

Fischer Boel explicó este martes ante la comisión de Agricultura de la Eurocámara que mañana presentará la propuesta al colegio de comisarios y que ya ha solicitado a la secretaría general de la Comisión Europea un "procedimiento acelerado" para "a finales de abril tengamos todo lo que necesitamos". Agregó que "el mensaje es que existe la voluntad política para avanzar rápidamente".

La Comisión anunció ayer en el Consejo de Agricultura que modificará la legislación comunitaria para que ésta dé cabida a ayudas para sofocar la crisis que ha provocado en el sector el descenso del consumo, a pesar de que no se den las condiciones que se contemplan actualmente en la ley, esto es, un brote en aves de corral y que existan restricciones al movimiento de pollos.

La decisión de ayer contrasta con la postura que mantuvo la Comisión en el anterior Consejo de Agricultura, en febrero, cuando se negó a atender las demandas de 13 de los 25 Estados miembros para paliar la crisis del consumo con ayudas europeas.

Sin embargo, la comisaria defendió hoy ante los eurodiputados que en el último mes "ha habido muchos casos" de gripe aviar que, aunque han afectado principalmente a aves silvestres, "refuerzan el impacto negativo de la percepción europea sobre el consumo de carne de pollo y han variado los precios". Agregó que "la situación es bastante grave en algunos países" entre los que citó a Francia, Italia, Alemania y Países Bajos.

Fischer Boel manifestó que es una "crisis sin precedentes, no es una situación normal del mercado", ya que los consumidores han reaccionado a las noticias de la gripe con un efecto en el consumo que "tiene que ser tratado".

Tal y como tampoco hizo ayer en el Consejo, la comisaria no se refirió a ninguna medida en concreto, aunque dijo que "hay que ampliar el alcance de las disposiciones de la organización común del mercado (de aves de corral) que prevé medidas especiales de respaldo por restricciones veterinarias y se comparta la carga financiera entre los Estados miembros y la Comisión", siempre que exista una petición previa por parte de un país europeo.

Insistió, además, en que las ayudas que se autoricen por este procedimiento no podrán suponer una "distorsión del mercado". Además, recordó que desde el principio de la crisis los Estados miembros han dispuesto de las ayudas ad minimis, 3.000 euros que puede recibir cada productor sin que para su autorización tenga que mediar el permiso de Bruselas. Fischer Boel admitió hoy que "sé que no es mucho, pero es más que nada".

MEDIDAS CONCRETAS POR PAÍS

Por lo que respecta a los medios para reducir la producción de pollo, la comisaria indicó que "ahora ya no es posible identificar medidas concretas", que en cada caso deberán adecuarse a las necesidades y circunstancias de cada estado miembro.

En cualquier caso, apuntó que cualquier planteamiento debería "atacar el problema río arriba" para "reducir la potencial producción y evitar problemas río abajo", metáfora con la que se refirió a su apuesta por sacrificar a los huevos y polluelos que ya expuso ayer en el Consejo.

"Tengo una idea muy personal de que hay que reducir la producción lo máximo posible. Si fuera responsable (de Agricultura) en un Estado miembro, me plantearía la destrucción de huevos para que en los 42 días del ciclo de producción de las aves de corral se reduzca al máximo la existencia de estos productos", dijo antes de agregar que, sin embargo, "me gustaría saber qué opinan los Estados miembros, porque no creo que podamos aplicar las mismas medidas a todos".

La Comisión decidió ayer finalmente responder a las demandas de más de la mitad de los países de la UE para ayudar al sector avícola, después de que en febrero Bruselas considerase suficiente el incremento de las restituciones a la exportación de carne de pollo que se habían producido desde diciembre del año pasado hasta situarse en los 30 euros por cada 100 kilos.

Sin embargo, Fischer Boel hoy admitió que este incremento tiene "una repercusión muy limitada porque hay países que han prohibido las importaciones de la UE".

OPINIÓN PÚBLICA

El mensaje que sí mantuvo desde su comparecencia ante el Parlamento Europeo del pasado mes de febrero es el relativo a la opinión pública y la campaña que deberían desplegar todos los eurodiputados para "disipar los rumores histéricos" que se han extendido desde el inicio de la crisis y que han llevado al temor de ciertos ciudadanos a no comer huevos ni carne de pollo.

La comisaria culpó de ello a algunos medios de comunicación y señaló el hecho de que la alarma ha cundido más en algunos países del sur de la UE donde "el descenso del consumo ha sido impactante" a diferencia de lo que ha ocurrido en "los Estados miembros más al norte", donde no ha caído tanto.