Iberdrola analiza su futuro en EDP, que podría aliarse con Gas Natural, según la prensa lusa

Actualizado: sábado, 30 septiembre 2006 0:26


LISBOA, 29 Sep. (EUROPA PRESS/Patricia Ferro) -

La española Iberdrola está analizando el futuro de su participación del 9,5% en Energías de Portugal (EDP) ya que la concreción del acuerdo estratégico con la empresa lusa se está demorando demasiado, asegura hoy el periódico luso 'Diario Económico', que cita fuentes próximas al presidente de la española, Ignacio Sánchez Galán, y que indica que la eléctrica portuguesa estudia una alianza con Gas Natural, con quien ya ha establecido contactos.

Los movimientos de los últimos días en el convulso mercado energético español también afectan al mercado portugués, especialmente a EDP que, ante las posibles fusiones y adquisiciones en el país vecino, puede quedarse sola y por tanto más vulnerable para ser objeto de una Oferta Pública de Adquisición (OPA). Por este motivo, se ve obligada a encontrar un socio estratégico.

Lo lógico es que éste fuese Iberdrola, ya que solamente sería necesario reactivar el acuerdo establecido en 1998, y además ése es el objetivo de la empresa española, que según la edición de hoy de 'Semanario Económico', que cita fuentes gubernamentales sin identificar, en los últimos tiempos ha intensificado las conversaciones con EDP con vista a celebrar un acuerdo estratégico a través del desarrollo de proyectos en común en las áreas de producción eólica y gas y en mercados como Brasil, Estados Unidos y China.

Sin embargo, ahora también surge el nombre de Gas Natural, ya que según las citadas fuentes, si se concretan los movimientos actuales, sería la única empresa disponible en el mercado ibérico, puesto que en caso de que se realice la fusión entre Iberdrola y Unión Fenosa, la primera debería cambiar su participación en la estructura accionista de EDP, señaló el presidente de EDP, Antonio Mexía. De hecho, la legislación española limita los derechos de voto al 3% de los accionistas con participaciones en empresas que concurran en el mismo sector, e Iberdrola tiene el 9,5% de la eléctrica portuguesa.

Además, el mismo rotativo indica, citando fuentes próximas al presidente de Iberdrola, que la eléctrica española "está descontenta" ante la falta de resultados prácticos de su inversión, alegando que "su participación vale demasiado para la rentabilidad obtenida hasta ahora". El 9,5% que Iberdrola tiene en EDP tiene un precio de mercado estimado de mil millones de euros.

Pero, a pesar de eso, Iberdrola ambiciona la formalización de un acuerdo estratégico con EDP y éste está tardando en concretarse. Un hecho que la eléctrica atribuye a "la falta de voluntad política" y que fue confirmado esta semana por el presidente del Consejo General y de Supervisión de la empresa lusa, Antonio de Almeida. Sin embargo, la misma fuente indica que Iberdrola hará todo lo posible para permanecer en el capital de EDP, aunque esté estudiando alternativas, argumenta el rotativo.

Consultada por Europa Press para comentar estas informaciones, Iberdrola Portugal reafirmó que "la relación accionista de Iberdrola con EDP sigue rigiéndose por los principios y objetivos firmados en la nota remitida a la Comisión Nacional de Valores Mobiliarios (CNMV) el pasado 6 de enero".

PROYECTOS VENTAJOSOS

En dicho comunicado, la eléctrica española afirmaba que "siempre con las debidas salvaguardias de cualquier potencial conflicto de intereses, Iberdrola Portugal está disponible para, en colaboración con la actual Comisión Ejecutiva, desarrollar sus mejores esfuerzos para identificar proyectos mutuamente ventajosos, capaces de crear sinergias tanto para EDP como para el Grupo Iberdrola".

Además, explicaba que dentro de ese marco había decidido "por su iniciativa" que "por ahora, no participará" en el Consejo General y de Supervisión donde tienen asiento todos los accionistas con una posición en EDP superior al 2% del capital social.

Ante esta situación, EDP, que no comenta posibles alianzas, argumenta la "indefinición del mapa empresarial ibérico" para aplazar hasta final de año el anuncio de sus futuros socios estratégicos. El presidente de la eléctrica lusa fue muy claro: "Iberdrola compró acciones de EDP, si no las vendió es porque está satisfecha", y añadió, "cualquier socio tiene que respetar tres condiciones: las prioridades de crecimiento, el control estratégico de esas áreas por parte de EDP, además de no poder tener conflicto de intereses", matizó.