MADRID, 29 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Ibex 35 ganó un 1,1% en la semana y se coló en los 13.100 puntos tras cinco jornadas marcadas por una persistente volatilidad y por los cada vez mayores temores a que la economía de Estados Unidos será incapaz de escapar de la recesión, a luz de los datos macro y pese a las declaraciones oficiales de optimismo.
Concretamente, el selectivo madrileño se colocó en 13.170,4 puntos en el último día de febrero, lo que supone una pérdida acumulada del 13,25% en lo que va de año, mientras el Indice General de la Bolsa de Madrid avanzó un 1% e inagurará el mes de marzo en los 1.425,98 enteros.
Las oscuras cifras macro procedentes de Estados Unidos y las palabras del presidente de la Reserva Federal (Fed), Ben Bernanke, vaticinando quiebras de pequeñas entidades financieras, junto a malos datos de inmobiliarias y aseguradoras americanas volvieron a estropearle la semana al Ibex, que había empezado con buen pié.
El índice inauguró la semana en terreno positivo, alentado el lunes por los planes de salida a bolsa de Visa, que aspira a obtener 11.000 millones de euros del mercado, y por buenos resultados y previsiones de constructoras (ACS, Sacyr o Ferrovial) el martes, jornada en la que se anotó la tercera mayor subida del año (+2,3%).
La inercia y los grandes valores como Telefónica y Banco Santander mantuvieron al selectivo madrileño en terreno positivo el miércoles, mientras Bernanke abría la puerta a una nueva bajada del precio del dinero si fuera necesario apoyar el crecimiento de la primera economía del mundo.
El horizonte se oscureció el jueves, al conocerse que Estados Unidos creció un triste 0,6% en el cuarto trimestre y que la agencia estadounidense de crédito y garantía hipotecaria Freddie Mac prevé ahondar este año en las pérdidas registradas el ejercicio anterior por culpa de la crisis inmobiliaria.
Mientras tanto, el euro se disparaba y superaba la barrera psicológica de los 1,5 dólares la unidad, y el petróleo Brent, de referencia en Europa, complicaba el escenario para los inversores al rebasar por primera vez en la historia la cota de 100 dólares el barril.
El convencimiento del presidente de Estados Unidos George W. Bush de que la mayor economía del mundo no entrará en recesión y de que no es necesario un nuevo plan de estímulo para sortear el panorama que esbozan con cada vez mayor claridad las señales (paro o confianza del consumidor) no consiguió serenar a los inversores de ningún lado del Atlántico.
A escala nacional, la semana estuvo marcada por el descalabro de Inmobiliaria Colonial, que ha retrocedido un 19,75% tras las dudas manifestadas por sus dos máximos accionistas, Luis Portillo y Nozar, sobre la oferta de compra propuesta por el fondo de inversión de Dubai.
De lejos, Bolsas y Mercados Españoles ocupó el segundo puesto del ranking de mayores descensos (-9,98%), aunque su beneficio creció un 54% en 2007, seguido de Acciona (-3,48%), Grifols (-3,43%), FCC (-2,36%), Iberdrola (-2,24%), Telecinco (-1,53%), Unión Fenosa (-1,27%), Abengoa (-0,74%), Inditex (-0,55%) y Criteria (-0,22%).
En el polo opuesto, los otros 25 valores que integran el selectivo madrileño lograron cerrar la semana con ganancias, liderados por Banco Popular, que avanzó un (+9,81%), Sacyr Vallehermoso (+7,50%), Ferrovial (+4,87%), Enagás (+4,40%) y Repsol (+4,24%). Por su parte, Telefónica avanzó un 1,26%.
Cintra, Indra, Red Eléctrica de España, Mapfre y Abertis subieron más de un 2%, mientras que el sector de la banca se mantuvo en positivo. Concretamente, Santander se anoto un 1,79%, por delante de BBVA (+1,62%), Banco Sabadell (+1,5%), Banesto (+1,25%) y Bankinter (0,62%), en una semana de movimientos corporativos protagonizada por la entidad que preside Pedro Guerrero.
