Confirma la valoración que Nueva Pescanova tenía de los contratos impugnados y reconoce que la antigua gestión infringió sus deberes de lealtad como administrador
MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Mercantil número 3 de Pontevedra ha desestimado, salvo por dos obligaciones accesorias en cada uno de los contratos, la petición de Nueva Pescanova de que se declarasen nulos los contratos de medidas de apoyo y de regulación de los mecanismos de pago, ambos formalizados en escritura de 27 de octubre de 2015, según ha informado la 'vieja' Pescanova a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En concreto, la sentencia, con fecha 15 de junio de 2017, confirma las obligaciones asumidas por Nueva Pescanova frente a la anterior gestión en los convenios y acuerdos celebrados entre ambas partes a través de los cuales se han venido estructurando sus relaciones recíprocas desde la reorganización del grupo.
De esta forma, los tribunales recuerdan a Nueva Pescanova su obligación de seguir prestando a la 'vieja' Pescanova las medidas de apoyo previstas en el proyecto, medidas que estaban siendo "deliberadamente incumplidas" por la nueva gestión en los últimos tiempos, y que deberá "respetar sin mayor demora ni excusa", según ha señalado la participada.
Sin embargo, el juzgado ha anulado dos cláusulas contractuales que se refieren al tipo de interés de demora del 20% que deberá abonar Nueva Pescanova por el retraso en el cumplimiento de sus obligaciones, a la penalización contractual fijada por dicho incumplimiento y a la pérdida del beneficio del plazo de determinadas deudas de la nueva gestión frente a la anterior en caso de incumplimiento por parte de Nueva Pescanova, por lo que la 'vieja' Pescanova considera que la multinacional carece de motivo alguno fundado en Derecho para dejar de cumplir sus compromisos contractuales.
De esta forma, la antigua gestión de la pesquera, que cuenta con el 1,6% del capital social de la firma, ha señalado que los tribunales vuelven a confirmar la "legalidad y eficacia" de los acuerdos que estructuran las relaciones societarias entre su firma y Nueva Pescanova.
Las acciones de la 'vieja' Pescanova, que regresó hace unas semanas a la Bolsa tras llevar suspendida cuatro años, se anotaban un alza superior al 31%, hasta intercambiarse a un precio de 1,865 euros tras conocerse la sentencia.
Por su parte, Nueva Pescanova ha remitido un comunicado en el que señala que la sentencia considera que la antigua Pescanova, en su condición de administradora "transitoria y provisional" de la compañía, infringió sus deberes de lealtad como administrador al imponer cláusulas "evidentemente gravosas para Nueva Pescanova".
La sentencia también declara que la antigua Pescanova vulneró sus deberes de lealtad como administradora e incurrió en conflicto de interés, al suscribir estos contratos que se excedían del contenido del convenio.
Nueva Pescanova presentó una demanda contra la antigua Pescanova en referencia a contratos unilateralmente decididos el 27 de octubre de 2015 por el consejo de Pescanova inmediatamente antes de la Junta General de Socios de esta última, donde la anterior gestión perdió el control de Nueva Pescanova, por su contenido abusivo.
Estas cláusulas imponían penalizaciones de hasta dos millones de euros a Nueva Pescanova en caso de no cumplir con unas obligaciones auto-otorgadas y unilateralmente impuestas por la antigua Pescanova y establecía pagos con un tipo de interés del 20% en caso de retraso.
La decisión de acudir a los tribunales por parte de Nueva Pescanova se produjo tras los "infructuosos y reiterados esfuerzos" de la actual gestión de conciliar posturas para solucionar estos y otros conflictos entre ambas partes.
