MADRID, 30 May. (OTR/PRESS) -
La brutal escalada del petróleo está provocando las protestas de numerosos sectores que necesitan el carburante para desarrollar su trabajo. Si hace unos días fueron los agricultores y ganaderos los que salieron a la calle para reclamar ayudas con las que paliar la subida a máximos del gasóleo, hoy son los pescadores los que tomarán el relevo con una manifestación en Madrid y el amarre indefinido de la flota. Durante la manifestación, en la cual se repartieron unos 20.000 kilos de pescado los marineros advirtieron de un posible desabastecimiento a partir de este fin de semana.
"Zapatero, embustero", "SOS, hundido" fueron algunos de los mensajes que lanzaron los pescadores que han llegado de toda España a la sede del departamento que dirige Elena Espinosa, en la plaza de Atocha de Madrid. Entre el ruido de los pitos y las nubes naranjas formadas por los botes de humo unos 10.000 pescadores, según los organizadores, protestaban por la falta de medidas del Gobierno ante la "grave crisis" que atraviesa el sector por la carestía del gasóleo, la peor "en los últimos 100 años"
La Confederación Española de Pesca (Cepesca) asegura que "el pescado podría desaparecer de la dieta de los españoles, así como también las empresas y los trabajadores" si no se toman medidas con carácter urgente. Según los pescadores el petróleo ha subido más de un 320% en los últimos cinco años y el precio del pescado está en niveles de hace 20 años.
En el documento que leyeron a la puerta del Ministerio los pescadores solicitan un plan de ajuste de la flota pesquera, "serio y responsable, aunque sea doloroso". Por ello proponen medidas de choque como la reducción de las cotizaciones a la seguridad social, reducción de las tarifas portuarias y que se cofinancie las primas de los contratos de cobertura.
Durante la lectura del documento se pidió a gritos la dimisión de Espinosa después de recordarle su origen gallego para criticarle que "debería conocer bien lo que está pasando en el sector pesquero".
Mientras, decenas de curiosos se acercaban a las dos furgonetas donde se repartía de forma gratuita unas 20 toneladas de pescado. Agolpados a las puertas de los vehículos, los transeúntes quitaban de las manos los peces y los metían en sus bolsas de plástico.
La marcha convocada hoy en Madrid, sin embargo, no es el único acto de protesta previsto por el colectivo, que también ha anunciado que mantendrá amarrada la flota a puerto desde hoy y con carácter indefinido. Una medida que ya se ha adelantado en algunas comunidades como Cataluña, Andalucía y Galicia. Un paro que, según advierten, provocará un desabastecimiento en los mercados a partir de este fin de semana.
MAS PROTESTAS
El colectivo del transporte por carretera también ha anunciado protestas para exigir medidas ante la imposibilidad, argumentan, de afrontar el aumento de costes que está provocando el alza del gasóleo. Por ello, la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer) ha convocado al sector a un paro indefinido a partir del domingo 8 de junio para protestar por el encarecimiento del combustible y las prácticas de dumping que realizan muchas empresas.
A la convocatoria se sumará otra pequeña organización empresarial del sector, Confedetrans. Por contra, la primera patronal del ramo, la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), que suma a unas 35.000 empresas, mantiene su postura de no sumarse al paro por considerar que primero es preciso agotar todas las líneas de diálogo con la Administración.
También los agricultores y ganaderos están en pie de guerra. Ambos colectivos, obligados a pagar cada vez más por el gasoil de los tractores y los piensos sin poder reflejar estas subidas directamente en los precios a los que venden sus productos, llevan varios meses llamando la atención a través de manifestaciones sobre el impacto del alza del petróleo en la producción agrícola y la cría de ganado.
La organización agraria COAG y las asociaciones de consumidores UCE y Ceaccu, reclaman al Gobierno a que actúe para impedir la "especulación" en el sector de la alimentación y reclamaron que se estudie la trazabilidad de los precios para "saber quién abusa" de los ciudadanos y "se lleva la gran tajada".
Para controlar la evolución de los precios, las tres organizaciones presentarán el próximo julio el primer Indice de Precios en Origen y Destino (IPOD), que analiza los 25 productos más consumidos en el país y que pretenden actualizar mensualmente, al entender que el Observatorio de Precios es un órgano "testimonial".
Por otro lado la Confederación del Taxi de España ha convocado una manifestación para el próximo jueves "ante la alarmante subida del precio de los gasóleos". Según la patronal, esta situación está provocando que más de 75.000 taxistas españoles estén inmersos "en una crítica situación económica". "En los últimos doce meses la factura del gasóleo que han de pagar los taxistas por vehículo se ha incrementado hasta los 6.864 euros, unos 1.848 euros más que en 2007", señalan.
PROTESTAS EN EUROPA
Las protestas que hoy llegan a España por parte de pescadores y transportistas reclamando medidas contra el alza de los carburantes tienen sus precedentes en otros países de la Unión Europea. En Francia, los pescadores están en pie de guerra desde hace dos semana con la flota amarradas y bloqueando los principales puertos pesqueros del país. La repercusión de estas protestas también han llevado a sus colegas portugueses e italianos a convocar a sus respectivos profesionales a parar a partir de hoy, al igual que ocurre en España, contra la carestía del gasóleo.
También los transportistas por carretera se han levantado contra el fuerte repunte del petróleo y su impacto en el precio que pagan por el gasóleo con el que mueven sus camiones. Si el pasado martes fueron los británicos los primeros en plantarse para rechazar los altos impuestos que pagan por el combustible, la organización de transportistas franceses que representa a las pequeñas y medianas empresas del sector ha amenazado con llevar a cabo acciones a nivel nacional si el Gobierno no responde en los próximos días a sus reivindicaciones para paliar las consecuencias del incremento del precio del crudo en su actividad.
