TOKIO, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
El fabricante japonés de automóviles Mitsubishi cerró el primer semestre del año fiscal 2009-2010 (abril-junio) con unas pérdidas netas de 26.400 millones de yenes (197 millones de euros al cambio actual), frente a un beneficio neto de 10.300 millones de yenes (77 millones de euros) en el mismo período del ejercicio anterior.
La corporación nipona explicó la caída de sus resultados por el fuerte retroceso de sus ventas, en un contexto de crisis del mercado automovilístico mundial, y por el efecto negativo derivado de la apreciación del yen.
La cifra de negocio de Mitsubishi se situó en 259.100 millones de yenes (1.933 millones de euros) entre los pasados meses de abril y junio, un 58% menos, mientras que el resultado operativo arrojó unas pérdidas de 29.600 millones de yenes (221 millones de euros), frente a un beneficio de 9.900 millones de yenes (74 millones de euros) en el mismo período ejercicio anterior.
Las ventas mundiales de Mitsubishi se situaron en 213.000 unidades en su primer trimestre fiscal, con un retroceso del 32%. En Europa, pese a los planes de estímulo a la demanda implementados en más de diez países, las matriculaciones de la firma nipona se hundieron un 47%, con 49.000 unidades, debido principalmente a la debilidad de los mercados de Rusia y Ucrania.
Mitsubishi confirmó los objetivos financieros para el año fiscal 2009-2010, que concluirá el próximo 31 de marzo, en el que espera obtener una cifra de negocio de 1,5 billones de yenes (11.200 millones de euros) y un beneficio neto de 5.000 millones de yenes (37 millones de euros).
