MADRID, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Nacional de Operadores Locales de Telecomunicaciones (Aotec) ha defendido ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que el mercado de los operadores móviles virtuales (OMV) "no está maduro para liberalizarlo" debido a los procesos de concentración empresarial que se han producido en el último año y medio.
El presidente de Aotec, Servando Sánchez Calero, ha trasladado el rechazo de la asociación a la liberalización del mercado de los OMV, por considerarla "perjudicial", a los responsables de la Dirección de Telecomunicaciones y del Sector Audiovisual de la CNMC con motivo de la consulta pública puesta en marcha por el regulador sobre la posibilidad de liberalizar el mercado de acceso a redes móviles.
En su opinión, la desaparición de los principales operadores móviles virtuales absorbidos por las grandes compañías de telecomunicaciones han supuesto un "drástico cambio" en el mercado de los OMV, que se ha reducido significativamente, "dejando en una situación de debilidad a las firmas supervivientes" a la hora de negociar ante sus proveedores de red, que también son competidores.
Además, la Aotec también señala que se han producido "profundas transformaciones" en el uso de la telefonía en el último año, por lo que los datos tomados por la CNMC como punto de partida, correspondientes a 2015, no se corresponden con la situación actual, en especial los referentes al consumo de datos en el teléfono móvil.
Por todo ello, los operadores locales consideran "imprescindible" esperar a que se asiente el sector y hacer un estudio exhaustivo del mercado minorista, con el objetivo de que se tome la decisión cuando se tengan datos actualizados.
Aotec está convencida de que hay un "alto riesgo" de que se involucione hasta la situación del año 2002, cuando el Gobierno había concedido una veintena de licencias de OMV que no pudieron ejercer su actividad debido a la negativa de las compañías propietarias de red a llegar a acuerdos. Así, recuerda que se tardaron otros cuatro años en lograr que el primer OMV comenzara a operar, tras tener que regular el mercado.
Así, incide en que una prueba de que es necesaria la regulación es que, con el desarrollo del 4G, los OMV han tratado de llegar a acuerdos con los operadores de red para tener acceso al nuevo ancho de banda móvil, pero estos están siendo "puntuales y lentos". "Y esto en un mercado regulado", apostilla.
