MADRID, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
Repsol YPF tiene previsto dedicar inversiones de exploración durante 2008 de 64 millones de dólares (41 millones de euros) al yacimiento ruso de Sajalin III (Oeste) en caso de que cierre con éxito las negociaciones para la compra de un 24% de esta área.
En una nota remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV, la petrolera confirma que está negociando con Rosneft su entrada en el bloque Veninsky, perteneciente a Sajalin III. "Aún no se ha alcanzado acuerdo alguno, por lo que no cabe necesariamente suponer el buen fin de las negociaciones", advierte.
La compañía presidida por Antonio Brufau se ha puesto como objetivo comprar una participación cercana al 24% que, en todo caso, estará condicionada a un proyecto exploratorio que comenzará en breve. Además, insiste en que las cifras finales sobre inversión, desarrollo, reservas y resultados futuros dependerán del éxito o fracaso de la fase exploratoria.
La entrada en este yacimiento de crudo y gas permitirá a Repsol reducir su exposición a países como Argentina y Bolivia, en línea con los objetivos estratégicos de la compañía.
Brufau adelantó a 'Financial Times' que la compañía mantiene "negociaciones avanzadas" con los actuales accionistas para adquirir una "participación significativa" en uno de los bloques actualmente en desarrollo en Sajalin, aunque no precisó más detalles.
El bloque está participado en un 74,9% por la rusa Rosneft, mientras que la china Sinopec posee el 25,1% restante. Un acuerdo con los propietarios del yacimiento de Sajalin, independientemente del tamaño de la participación, representaría la primera incursión significativa de Repsol en Rusia, donde en 2006 adquirió un 10% de West Siberian Resources por 57 millones de euros.
Este acuerdo podría mejorar las reservas de petróleo y gas de la compañía española, que informó a la Comisión del Mercado de Valores de EEUU (SEC) de que sus inventarios a finales de 2007 ascendían a 2.400 millones de barriles de petróleo, suficiente para los próximos seis años y medio a los actuales niveles de producción, frente a los 3.300 millones de barriles con los que contaba a finales de 2005.
