Sarkozy creará un fondo soberano para proteger la industria francesa

Actualizado: jueves, 23 octubre 2008 23:26


PARIS, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, anunció hoy la creación de un fondo soberano antes de fin de año para financiar en Francia proyectos industriales innovadores y evitar que las empresas galas caigan en manos extranjeras como consecuencia de una eventual devaluación bursátil debido a la crisis financiera.

En línea con la idea expuesta hace dos días en el Parlamento Europeo que Sarkozy quiere que imiten sus socios comunitarios, este "gran fondo estratégico de inversión nacional" estará al servicio de la política industrial y tendrá como objetivo "estabilizar el capital empresarial". "Si lo hacen los productores de petróleo y los rusos, no hay ninguna razón para que Francia no lo haga", justificó el presidente durante un discurso pronunciado en Annecy ante empresarios.

También dejó claro que no se tratará de "socorrer actividades caducas" sino de "invertir en el futuro" y aportar fondos propios para financiar proyectos industriales "innovadores y audaces".

No se tratará, insistió, de subvencionar empresas a fondo perdido, sino de estabilizar el capital empresarial que tiene futuro, dispone de tecnología clave y puede ser objeto de predadores que quieran aprovecharse de la infravaloración bursátil momentánea o de la dispersión del accionariado para hacerse con ella", explicó.

Y a continuación garantizó que no será él el presidente de la República que verá un día a los grandes grupos industriales franceses pasar a otras manos "simplemente por haber permanecido con los brazos cruzados frente a la crisis financiera".

Sarkozy desgranó igualmente otras medidas para paliar en la economía real los efectos de la crisis financiera. Así, anunció la exoneración del impuesto profesional hasta 2010 para las empresas que realicen nuevas inversiones, garantizando que será el Estado el que compense a los Ayuntamientos del dinero que dejen de percibir por este concepto.

Además, para que los bancos realicen su labor de financiación de la economía, se nombrará un "mediador de crédito" puesto a disposición de las empresas que tengan dificultades para lograr un préstamo. "Que todo el mundo sepa que el crédito que hemos puesto en fondos de garantías o fondos propios a disposición de las instituciones financieras queremos que se encuentre en la financiación de las Pymes. No en los discursos, en los hechos", advirtió Sarkozy.

Asimismo, para dotar a la economía francesa de los mejores medios posibles para competir una vez superada la crisis, reclamó "más flexibilidad, más reactividad y más capacidad de innovación". En este contexto, pidió al Gobierno flexibilizar las cortapisas a la apertura de las tiendas los domingos, siempre sobre la base voluntaria.

Antes de anunciar todas estas propuestas, el jefe del Estado galo hizo un análisis de las recientes actuaciones estatales, no sólo en Francia sino en el resto de Europa, para acudir en rescate del sistema bancario, seriamente afectado por la tormenta desencadenada al otro lado del Atlántico y llegó a la conclusión de que vivimos el "fin de la dictadura del mercado y la impotencia de lo público".

Para Sarkozy la quiebra del mercado, las intervenciones de los Estados para salvar a los bancos, las nacionalizaciones totales o parciales de las instituciones financieras, el recurso al Banco Central Europeo, todo lleva a preguntarse sobre "la redefinición del rol del Estado en la economía".

En esta línea, destacó que hasta ahora se creía que todo el poder estaba en la autorregulación, en los expertos, la libre competencia y el mercado, pero que "desde ahora", habrá "más política" porque "la ideología de la dictadura del mercado y de la impotencia pública ha muerto con la crisis financiera". Así pues, a su juicio lo que se diseña es "una nueva relación entre la democracia y la economía.

A su modo de ver desde ahora, nada en la economía mundial será como antes y que querer seguir con las mismas prácticas sería un error "fatal".

EL REGRESO DE LA POLITICA

En este sentido, destacó que "si hay un hecho relevante que surge de esta crisis es el regreso de la política en el verdadero sentido el término", dado que está claro que no puede resolverse "sin una intervención masiva de los Estados" y requiere "con urgencia" un "nuevo orden económico, financiero y monetario" que expresa, en el fondo, una necesidad "profunda de política".

Así, tras reiterar su tesis sobre la necesidad de refundar las bases del capitalismo diseñadas tras la Segunda Guerra Mundial en Bretton Woods, esbozó las líneas de lo que puede ser la aportación francesa a la cumbre que se celebrará en Estados Unidos el próximo 15 de noviembre: la revisión del papel del Estado en la economía y una nueva relación de la economía con la democracia.

Y alertó de lo que está en juego en esa cita si se salda con un fracaso el intento de moralizar el actual sistema capitalista. "Corremos el riesgo de tener que enfrentarnos en todo el mundo a la revuelta de las clases populares y de las clases medias", reconoció Sarkozy.

El presidente francés puso fin a su intervención con una frase grandilocuente: "Hace falta reinventar el mundo", dijo. "Nos encontramos situados por el destino en un momento en el que hace falta reinventar el mundo. No tenemos otra elección más que acudir a la cita que el destino nos ha fijado. Hace falta imaginación, valor, voluntad, audacia", proclamó.